¡Espéralo porque Él llega!

Aunque el Señor te dé pan de adversidad y agua de aflicción, tu maestro no se esconderá más; con tus propios ojos lo verás. 

Isaías 30:20.

Lectura: Isaías 30:15-26.  Versículo del día: Isaías 30:20.

MEDITACIÓN DIARIA

Si estás pasando por una adversidad donde la luz cada día se extingue más, no temas; el Señor no te ha abandonado.  Más bien, Él está a la espera de ti; cada vez que reclamas, lloras, te desesperas, estás enredado y dudas, lo único que hace es mirarte con su amor y clemencia así no lo creas. El Señor espera por ti para tenerte piedad y compasión. ¡Él es un Dios de justicia! (v. 18).  En tu confusión vas a diestra y siniestra, pero no te deja.  “Tus oídos percibirán a tus espaldas una voz que te dirá: “Éste es el camino; síguelo” (v. 21). Siempre me he preguntado porque el Señor aguarda hasta el último minuto cuando ya las fuerzas no dan más; cuando estamos completamente agotados y creemos que no hay nada que hacer porque todo lo vemos perdido. ¡Pero no nos deja ahí! El Señor cumple su promesa.  Así que con todo mi corazón te digo: no temas ¡Él llega; está latente esperando por ti! ¡Ríndete! ¡Él llega! Yo te lo aseguro. Tal vez permite toda esta aflicción para que nos demos cuenta que es el Único que puede sacarnos de ese hoyo.

No creas que no sabe lo tuyo y ya te dejó; al contrario: “tu maestro no se esconderá más; con tus propios ojos lo verás” ¡Dichosos todos los que en Él esperan!

Amado Señor: Gracias porque Tú respondes así sea en el último segundo. Tu soberanía y misericordia nadie las puede cuestionar porque son tuyas y te pertenecen. Gracias porque siempre estarás a nuestro lado y nunca nos dejarás y abandonarás. Yo te ruego mi Señor por las personas que están atravesando una dura aflicción para que sepan esperar y vean al final tu gloria resplandeciendo en sus vidas. ¡Muchas gracias bendito Dios!

Un abrazo y bendiciones.