martes, 30 de noviembre de 2021

Acerquémonos al Trono de la Gracia con corazón limpio

Yo sé que tú amas la verdad en lo íntimo; en lo secreto me has enseñado sabiduría. 

Salmo 51:6 NVI.


Lectura: Salmo 51:1-19. Versículo del día: Salmo 51:6.


MEDITACIÓN DIARIA


Personalmente considero que este Salmo de David es un ejemplo a seguir de oración, clamor y arrepentimiento, ya que todos de una u otra manera le hemos fallado al Señor. David desborda su corazón ante Dios y el versículo del día me impacta porque en verdad, es la intimidad con nuestro Dios que Él nos muestra y enseña lo que espera de cada uno. El decirle que nos lave de tal manera que quedemos completamente limpios ante su Presencia es reconocer hasta donde hemos fallado (v. 7). Igualmente tener la alegría y el gozo que se pierden al caer, es restaurador (v. 8). No solo David pide que le devuelva la alegría de la salvación, también la disposición para obedecerle. Entiende muy bien que al Señor no le interesan los sacrificios, porque a Dios le gusta es, un espíritu quebrantado y arrepentido y más bien le pide que sus labios se desaten en alabanzas hacia Él (vv. 12, 15-17).

El apóstol Juan nos dejó en su Carta lo siguiente: “Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad” (1 Juan 1:9). Así que no dudemos en acercarnos al Trono de la Gracia que el Señor estará presto a escucharnos, perdonarnos y limpiarnos.


Amado Señor: venimos ante Ti con un corazón contrito y humillado a confesar nuestros pecados. Perdona Señor el dejarnos llevar por las atracciones y deleites que el mundo nos ofrece; por nuestra naturaleza carnal y los engaños del enemigo para alejarnos de Ti. Sabemos que Tú no desprecias al corazón arrepentido y quebrantado. Escucha nuestra oración Señor y que nuestros labios proclamen tu salvación y favor. Gracias por estar a nuestro lado y levantarnos con tu misericordia y bondad. ¡Alabamos tu Nombre por siempre!


Un abrazo y bendiciones.

 

lunes, 29 de noviembre de 2021

Aun así, yo me regocijaré en el Señor

Aunque la higuera no florezca, ni haya frutos en las vides; aunque falle la cosecha del olivo, y los campos no produzcan alimentos; aunque en el aprisco no haya ovejas, ni ganado alguno en los establos; aun así, yo me regocijaré en el Señor, ¡me alegraré en Dios, mi libertador! 

Habacuc 3:17-18. NVI.


Lectura: Habacuc 3:1-19.  Versículos del día: Habacuc 3:17-18.


MEDITACIÓN DIARIA


El sábado en la mañana estaba contemplando el amanecer desde la ventana de mi alcoba y al ver esos arreboles tan hermosos cruzando el firmamento me preguntaba sobre la grandeza y majestad de nuestro Dios. Vino entonces, a mi mente el hecho de no haber llegado mis hijitos y muñecos de Colombia, y en aquel momento recordé el pasaje de Habacuc y sobre este quise hacer mi devocional de hoy.

Sí; no es fácil alegrarse cuando las cosas no nos salen bien. La muerte de mi hermano fue un duro golpe para mí. Pero salir la cita en la Embajada de Colombia en Bogotá para los papeles de Luquitas mi nieto, fue un gran aliciente en esos momentos, en que también me encontraba en la capital. Así que fui menguando mi dolor con la esperanza de tener a todos mis hijitos aquí y celebrar juntos las festividades de fin de año empezando por el hermoso día de Acción de gracias. Orábamos porque todo saliera bien y no hubiera inconveniente alguno en su llegada. La sorpresa fue en el mismo aeropuerto de Colombia donde no les permitieron seguir por tener vencida la entrada como residentes. ¡No lo podía creer! Hablé con el Señor diciéndole cosas como ¿por qué dejaste que me ilusionara si esto no iba a resultar? Y como mi intención desde hace ocho días era dedicarle toda la semana a alabarlo, exaltarlo y darle gracias, exactamente sentí la voz del Señor diciéndome: entonces por esto, ¿ya no me alabarás? ¿Ya no soy digno de tu agradecimiento? Aun llorando le respondí que me sometía, puesto que Él es Soberano y sabe exactamente por donde llevarnos.

Ahora entiendo por qué el Señor puso en mi corazón el sábado la oración de Habacuc. Porque, aunque todo falte; aunque no vea el sol resplandecer y todo se convierta en oscuridad, mi ser no puede dejar de alabar al Señor mi Dios. El mismo Señor reforzó lo que por un momento me detuvo y casi roba mi alabanza hacia Él.


Mi buen Señor y Dios: te doy gracias porque nadie mejor para conocerme que Tú. Te doy gracias porque tienes una manera tan dulce de hablarme y hacerme caer en cuenta de mis errores. Eres en verdad, el Dios que me ama y me levanta. Te honro y te doy toda la gloria a Ti porque solamente Tú Eres digno de recibirla. Y también digo que, aun así, yo me regocijaré en el Señor, ¡me alegraré en Dios, mi libertador! ¡Te amo mi Señor!


Un abrazo y bendiciones.

sábado, 27 de noviembre de 2021

Nuevamente gracias Señor

Den gracias al Señor y proclamen su grandeza; que todo el mundo sepa lo que él ha hecho. 

Salmo 105:1. NTV.


Lectura: Salmo 105:1-5.  Versículo del día: Salmo 105:1.


MEDITACIÓN DIARIA


No puedo ser ingrata y menos con mi Dios porque a lo largo de mi vida he visto sus maravillas obrando. También puedo decir que me siento orgullosa del Señor porque no hay otro Dios como Él y me alegro de corazón porque lo adoro (vv. 2-3).

Ayer estaba decaída pero el Señor no me dejó. Me consintió, me levantó y puso gozo en mi corazón. Así que hoy amanecí con el ánimo arriba. Mi hijo Danielito me compartió el pasaje de Filipenses 4:6-7 y de verdad lo puse en práctica: presenté al Señor mi petición, le di gracias y ahora estoy confiada en que Dios está guardando mis pensamientos y corazón en Cristo Jesús. Estoy tranquila. El Señor también me dice que no me angustie, sino que confíe en Dios y en Él (Juan 14:1). Así que ahora le seguiré dando gracias.


Mi amado Señor: gracias porque siempre estás pendiente de mis actuaciones, de mis sentimientos y de lo que me inquieta. Gracias porque Eres el Dios Grande y Poderoso que me sostiene. Sigo dándote las gracias y ahora proclamo que tu fidelidad jamás se termina. Estás a mi lado mostrándome tu amor y ternura. Gracias porque todo lo nuestro está en tus manos. ¡Aleluya! ¡Alabado seas Señor! ¡Tu gran amor perdura para siempre!


Un abrazo y bendiciones.

viernes, 26 de noviembre de 2021

Tú lo sabes todo y fue tu decisión

 Sean agradecidos en toda circunstancia, pues esta es la voluntad de Dios para ustedes, los que pertenecen a Cristo Jesús. 

1 Tesalonicenses 5:18. NTV


Lectura: 1 Tesalonicenses 5:12-22.  Versículo del día: 1 Tesalonicenses 5:18.


MEDITACIÓN DIARIA


Bueno; un Proverbio dice: “El hombre propone y Dios dispone” (Proverbios 16:1. NVI). Tuve que cambiar mi devocional y entender que mis planes no son los de Dios. A veces sin lograr entender lo nuestro, tenemos que aceptar la voluntad de Dios. Él sabe mejor que nadie por qué suceden las cosas. Yo estaba feliz en el día de ayer de Acción de gracias. Me fascina ese día. Pero el Señor me dijo: ¿si cambio tus planes vas a estar igual? Sí, fue un golpe duro para mí. El caso es que con mucha alegría y entusiasmo estábamos esperando a nuestros Muñecos de Medellín con sus papis y por circunstancias adversas no pudieron viajar. Todo lo teníamos preparado. La Cena, el apartamento de Dany y el nuestro. El viaje hacia Port Saint Lucie, todo. Pero Dios dijo no. Yo le dije Señor, lo acepto, pero no lo entiendo. Bueno y ahí viene mi prueba: ¿de todas maneras me alabarás? ¿Darás gracias por esto? Oh Señor, no importa. Con mis ojos llorosos, pero acato tu decisión. ¡Te alabo y te bendigo Soberano Dios!

Mi Señor: gracias, gracias. Infinitas gracias. Tú Eres Soberano y conoces mejor que yo los caminos. Toma mis lagrimas nuevamente en tu redoma y como hace un mes ven hacia mí. Lléname de Ti, de Tu Palabra y de tu amor. Son muchas otras cosas por las que estar agradecida. Muchas gracias mi buen Señor.  ¡Te amo Dios y Señor mío! ¡En Ti está mi fortaleza y esperanza!

Un abrazo y bendiciones,

Dora C.

jueves, 25 de noviembre de 2021

El gran día para decirte: Gracias, muchas gracias mi Señor

¡Aclamen alegres al Señor, habitantes de toda la tierra!  ¡Prorrumpan en alegres cánticos y salmos! ¡Canten salmos al Señor al son del arpa, al son del arpa y de coros melodiosos! 

Salmo 98:4-5. NVI.


Lectura: Salmo 98:1-9.  Versículos del día: Salmo 98:4-5.


MEDITACIÓN DIARIA


Hoy es el gran día. El día de reunirnos en familia para decirte: Gracias, muchas gracias mi Señor. Haz hecho tantas cosas por nosotros que no tenemos palabras para agradecerte tanto. ¿Será un día más Señor? No; no puede ser un día más. Es el día especial para alabarte y para exaltar tu Nombre. Ayer estaba divisando el panorama desde el balcón de mi ventana. ¡Qué hermoso atardecer! Me quedé extasiada mirando ocultarse al astro rey. ¡Esas son tus maravillas!  ¿Recuerda Señor cuando te dije que ese bello árbol percibido en la distancia se me asemejaba a Ti? ¿Recuerda que lo puse: ‘Jesús camino a Emaús’? Ya no tiene la forma inicial y sus ramas han opacado Tu figura. De todas maneras, Eres Tú también; él es Tuyo y se me antoja que ahí estás mirándome desde la otra orilla. Tanta belleza venida de tus manos; tanta bondad derramada sobre mi familia. ¡Oh Señor! ¿Cómo no darte las gracias por tanto bien recibido? ¡Que los pueblos todos te alaben! ¡Que brame el mar y todo lo que él contiene! ¡Que batan palmas los ríos y los montes canten jubilosos! ¡Sí mi Señor que toda la tierra y el universo entero proclamen que Eres Dios!


Un abrazo y bendiciones.

miércoles, 24 de noviembre de 2021

Quiero estar a solas Contigo

Y después del fuego vino un suave murmullo. 

1 Reyes 19:12. NVI.


Lectura: 1 Reyes 19:1-14.  Versículo del día; 1 Reyes 19:12.


MEDITACIÓN DIARIA


El profeta Elías huye porque Jezabel quería matarlo. Caminó todo un día por el desierto y se sentó bajo la sombra de un arbusto con ganas de morirse. Allí se le apareció el ángel del Señor con pan y agua para que comiera y bebiera porque tenía un largo viaje que atravesar hasta el Monte de Horeb. Se dirigió hacia allí y paso la noche en una cueva. El Señor se le aparece y le pregunta: “—¿Qué haces aquí, Elías? —Me consume mi amor[c] por ti, Señor Dios Todopoderoso —respondió él—” (vv. 9b-10). El Señor manda a Elías a presentarse delante de Él en la montaña. Elías fue a la montaña y un viento tan violento azotó la montaña que las rocas se aflojaron, pero el Señor no estaba ahí. Después hubo un terremoto y más tarde un incendio y en ninguno de estos, estaba el Señor. Vino un suave murmullo. Cuando Elías lo oyó, se cubrió la cara con su manto, salió y se paró a la entrada de la cueva (vv. 11-13). El Señor volvió a preguntarle: “—¿Qué haces aquí, Elías?” y él le responde nuevamente: “—Me consume mi amor por ti, Señor Dios Todopoderoso” (vv. 13 y 14). Ahí fue cuando el Señor le habló y se manifestó.

Ha pasado otro día y quiero seguir a solas Contigo. No quiero interrupciones, solo quiero encontrarme en la dulce calma de tu Presencia y entregarte toda mi vida. Quiero buscar una silla para Ti y sentarme Contigo; y si  después salgo a caminar, verte delante de mi andar y al caer la tarde divisarte en el horizonte bajo los arreboles del ocaso que despiden la jornada. El Señor espera para hablarnos en medio de la quietud; en el susurro de una brisa apacible. Delicadamente, como solamente Él sabe hacerlo. Señor, ¡Solo quiero estar Contigo!


Mi Señor: no sé si al encontrarme Contigo tan a solas, la vida me parece un sueño o si más bien ese sueño se hace realidad. Mis pensamientos me confunden, quizá como le pasó a Elías, pero sé Señor que ahí estás para despejar toda duda que me asalte y para brindarme la paz que necesito. Gracias, muchas gracias bendito Señor porque buscas tu forma de manifestarte y venir hacia mí, para demostrarme no solamente tu amor, sino tu Grandeza y Majestad. ¡Te amo mi Señor!


Un abrazo y bendiciones.

martes, 23 de noviembre de 2021

En mi despertar Contigo

Dios, Dios mío eres tú; De madrugada te buscaré; Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, En tierra seca y árida donde no hay aguas. 

Salmo 63:1. RVR1960.


Lectura: Salmo 63:1-8.  Versículo del día: Salmo 63:1.


MEDITACIÓN DIARIA


Esta es la oración al Dios de mi vida:


Estos días quiero que mi despertar sea solamente para Ti. Para decirte cuánto te amo y cuánto quiero agradarte. ¡Te amo mi Señor! Las palabras se me van. Solo quiero saber que estás ahí, muy juntito a mí. Quiero tenerte por siempre así. Es tan bello sentir esa Presencia Tuya aun sin el clarear del día, porque tu luz, tu inmensa luz lo refleja todo en mi ser. ¡Te amo mi Señor!

He visto y contemplado tu poder en mi vida. ¿Cómo olvidarlo Señor? Tú has hecho maravillas en mi ser y cada vez que lo recuerdo, no puedo dejar de decirte: gracias, muchas gracias buen Dios. Por eso cuando estoy en tierras áridas mi corazón te busca; ¡te anhelo mi Señor! Sé que Tú regarás mi corazón con la fuente inagotable de tu manantial.


Un abrazo y bendiciones.

lunes, 22 de noviembre de 2021

En mi caminar Contigo

 ¡Canten al Señor una nueva canción! ¡Que toda la tierra cante al Señor! 

Salmo 96:1. NTV.


Lectura: Salmo 96:1-13.  Versículo del día: Salmo 96:1.


MEDITACIÓN DIARIA


Desde antes de llegar a este país admiraba su fiesta de ‘Acción de Gracias’. Estando aquí, la vivo con más alegría e incluso no me canso de decirle: ¡Gracias Señor! Esta semana mis devocionales serán dedicados a Aquel que es el Dueño absoluto de mi vida y que así esté triste, Él me entiende y sostiene con su amor y ternura.

Cada mañana al despertar, le doy gracias por la oportunidad de un día más. Mi corazón reboza de alegría, al saber y comprender cuánto me ama. Al entender que todo lo que hace es porque en su infinita soberanía es lo mejor así no lo conciba, pero poco a poco con su amor característico me va mostrando y respondiendo mis ¿por qué? Y sin tener yo derecho a alguna explicación, el Señor se deja oír.


Mi amado Señor: al salir en las mañanas a caminar y divisar los campos en su verdor y bajo el azul intenso del firmamento los pajaritos cantando, las garzas buscando su alimento, los patitos nadando o descansando, las ardillas saltando y jugando como al escondite; incluso escuchar el cacareo del gallo al pasar, no puedo más que elevar mi mirado hacia el cielo y darte las gracias porque he entendido que esa es la forma en que no solo manifiestas tu creación, sino que te basas en ella para consentir mi alma entristecida. ¡Como no alabarte mi Señor! ¡Cómo no gritar que te amo y que Eres todo para mí! Sí; que toda tu creación entera te alabe y te honre porque Eres el Dios Grande, Poderoso y Majestuoso. ¡Oh Señor, toda la gloria es para Ti! ¡Que los pueblos te alaben y griten que Tú reinas!


Un abrazo y bendiciones.

sábado, 20 de noviembre de 2021

Humildad, ante todo

Por la gracia que se me ha dado, les digo a todos ustedes: Nadie tenga un concepto de sí más alto que el que debe tener, sino más bien piense de sí mismo con moderación, según la medida de fe que Dios le haya dado. 

Romanos 12:3. NVI.


Lectura: Romanos 12:1-21.  Versículo del día: Romanos 3.


MEDITACIÓN DIARIA


El apóstol Pablo nos habla respecto a los dones que cada uno tiene en la Iglesia, diciendo que, así como el cuerpo es uno solo con muchos miembros que desempeñan diferentes funciones, en la Iglesia sucede lo mismo: cada quien desempeña una función distinta. Unos el de servicio, otros el de enseñanza, otros el de dirigir, otros el de consolación o animación, otros el de socorrer a los necesitados. Lo importante es que lo que se haga sea como para el Señor y dándolo con amor y alegría. Por eso nadie debe envanecerse pensando que hace mucho o que es muy importante. La humildad debe reinar, ante todo.

Pienso también, que se debe tener en cuenta en cualquier tarea que se realice, tener esa humildad. No pensar que por su cargo o estudio puede tratar mal a los distintos miembros. En el cuerpo de Cristo no pueden existir rencillas ni orgullo. Por eso nos recalca la lectura: “Ámense los unos a los otros con amor fraternal, respetándose y honrándose mutuamente” (v. 10). Es que el amor debe ser la insignia de todo cristiano. Desde que se tenga amor y se haga cualquier servicio con este ingrediente ya se ha abonado mucho terreno.


Señor Jesús: oramos para que no permitas que entre nosotros se den situaciones de desprecio o indiferencia hacia el hermano que no tiene los mismos dones o beneficios que otros. Enséñanos humildad para ser exaltados como lo dice tu Palabra. Pon una sobredosis de tu amor no solamente hacia las personas por ministrar sino por el mismo servicio a realizar. Gracias bendito Señor. Gracias por tu enseñanza y por tu Santo Espíritu, quién es el que nos instruye para realizar la labor como es tu deseo. ¡Te amamos Señor!


Un abrazo y bendiciones.

viernes, 19 de noviembre de 2021

¡Gloria por siempre a tu Nombre!

 Aleluya! ¡Alabado sea el Señor! ¡Cuán bueno es cantar salmos a nuestro Dios, cuán agradable y justo es alabarlo! 

Salmo 147:1. NVI.


Lectura: Salmo 147:1-20.  Versículo del día: Salmo 147:1.


MEDITACIÓN DIARIA


Este Salmo nos habla de la grandeza de nuestro Dios; nos dice que es agradable alabarlo porque así no lo entendamos o creamos, Él está pendiente de nosotros; el Señor “restaura a los de corazón quebrantado y cubre con vendas sus heridas” (v. 3). Toda su creación lo conoce porque el cielo sabe que su Dios está pendiente de cada detalle y las estrellas se alegran al ver que para su Creador son especiales ya que a cada una llama por su nombre. “Canten al Señor con gratitud; canten salmos a nuestro Dios al son del arpa” (v. 7). Sí; es el Señor el que envía las lluvias a la tierra y hace crecer la hierba sobre los montes; Él es quien alimenta al ganado y a las crías de los cuervos (vv. 8-9).

Si esto lo hace el Señor con su naturaleza vegetal y animal, ¿qué nos hace pensar que de nosotros no estará pendiente? No; de ninguna manera. El Señor para los suyos tiene solo planes de bienestar y no de calamidad. Nos quiere ofrecer un futuro promisorio para darnos un porvenir y una esperanza; para darnos el fin que esperamos (Jeremías 29:11). ¡Gloria al Señor!


¡Alabado Eres Señor! Tu grandeza es inescrutable. Eres el Dios por excelencia y no existe otro fuera de Ti. ¡Te cantamos y te adoramos bendito Señor! Es agradable estar en tu Presencia y alabarte reconociendo que lo Eres Todo para nosotros. No tenemos palabras para decirte cuán agradecidos estamos de contarnos entre los Tuyos. Solo tenemos en nuestro corazón agradecimiento y exaltación. ¡Gloria por siempre a Tu Nombre!


Un abrazo y bendiciones.

jueves, 18 de noviembre de 2021

Ahora somos nosotros los privilegiados por su gracia

Así lo dice Dios en el libro de Oseas: Llamaré ‘mi pueblo’ a los que no son mi pueblo; y llamaré ‘mi amada’ a la que no es mi amada. 

Romanos 9:25. NVI.


Lectura: Romanos 9:1-33.  Versículo del día: Romanos 9:25.


MEDITACIÓN DIARIA


Es indudable el amor de Dios por los israelitas. Dios buscó a ese pueblo porque así lo quiso y decidió; no porque ellos hicieran algo por alcanzarlo. Ellos fueron objeto de una bendición que no supieron sostener. Incluso cuando el Señor Jesús vino a la tierra, cerraron sus ojos y oídos para no tomarlo como el Hijo de Dios que es y que se les manifestó de tantas maneras. “Vino a lo que era suyo, pero los suyos no lo recibieron” (Juan 1:11). Había entonces, que comenzar el plan de salvación para los gentiles. Por eso, lo dice el Señor a través del profeta Oseas y Pablo lo recuerda: “Llamaré ‘mi pueblo’ a los que no son mi pueblo; y llamaré ‘mi amada’ a la que no es mi amada”.

La salvación llegó a los gentiles por el rechazo de los judíos. Y así cumplió Dios su propósito tanto para su pueblo como para la que ahora es su Iglesia. Es una salvación que se da al hombre solamente por la misericordia y amor de Dios. Se obtiene creyendo y confesando con la boca que Jesús es el Señor y que Dios lo levantó de entre los muertos (Romanos 10:9). “Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios” (Juan 1:12). Nos sigue diciendo el apóstol Pablo en su Carta: “¿Qué concluiremos? Pues que los gentiles, que no buscaban la justicia, la han alcanzado. Me refiero a la justicia que es por la fe” (v. 30 en la lectura). Sí; exactamente. Por la fe en el Hijo de Dios. Y muy bien nos explica por qué Israel no la alcanzó: “En cambio Israel, que iba en busca de una ley que le diera justicia, no ha alcanzado esa justicia.  ¿Por qué no? Porque no la buscaron mediante la fe, sino mediante las obras, como si fuera posible alcanzarla así” (vv. 31-32).

Por esto mismo es importante que nosotros aprendamos a vivir por la gracia derramada sobre su Iglesia. No necesitamos volvernos a la ley; si lo hacemos caeríamos en lo mismo que cayó el pueblo judío. Somos salvos por gracia (Efesios 2:8-9). La salvación es un regalo precioso de Dios y tenemos que valorarlo y atesorarlo.


Dios Padre: gracias por habernos mirado con ternura y amor. Tu compasión por nosotros se manifestó completamente a través de tu Hijo amado Jesús, quien vino a morir en esa cruenta cruz por los pecados de la humanidad. Gracias Señor Jesús por lo que hiciste, sin tener en cuenta que éramos unos intrusos pecadores y perversos. A Ti Jesús no te importó; solamente derramaste tu sangre sin excluir a nadie de acogerse bajo ella, para alcanzar la salvación. Enséñanos a vivir bajo la gracia y no cargarnos con obras o con leyes que para Ti no cuentan. ¡Te amamos Señor Jesús!  ¡Te amamos bendito Dios!


Un abrazo y bendiciones.  

miércoles, 17 de noviembre de 2021

Señor: llena mi corona con sus nombres

La alegría de los abuelos son los nietos. 

Proverbios 17:6 TLA.


Lectura: Proverbios 17:1-7.  Versículo del día: Proverbios 17:6.


MEDITACIÓN DIARIA


La mayoría de las versiones dicen que los nietos son la corona de los abuelos; pero resolví escribir el de la TLA porque ellos han sido portadores de alegría sin cesar. Y nos preguntamos entonces, ¿qué es una corona? Una corona es un aro decorado con flores, hojas, u otros objetos, que se sitúa en la cabeza como símbolo de una insignia honorífica, una dignidad o un adorno.

Yo tengo dos nietos hasta ahora, y uno que viene en camino. ¡Seguro que llegarán más! Faltan los de mi hijita por lo menos. Y puedo decir sin pensar que me equivoco, que ellos son el aire fresco y nuevo que necesitamos, ya en la etapa de los años dorados por la que nos movemos. Sí, sí; los nietos traen alegrías con recuerdos renovados de los tiempos en que esos padres también fueron chiquillos y quizá por una u otra razón no festejamos sus travesuras como lo hacemos ahora con sus hijos. Yo diría que los nietos son alegría, bullicio. juguetes, llantos y hasta peleas infantiles.

Vi escrito que un nieto es un anhelo convertido en realidad. Seguro que sí; se tienen, se consienten se aman profundamente, sin recaer la responsabilidad sobre nuestros hombros. Es a los nietos a quienes quizá les robemos los besos que no pudimos darle a nuestros hijos y a la vez recibir los que de pronto no pudimos volver a obtener de ellos. Deseo que mi corona esté adornada con el nombre de cada uno de estos chiquitos. Que cuando me la ponga, su risa me refresque el alma y su recuerdo perdure para no olvidar sus travesuras. Me siento orgullosa de llevar mi corona con la insignia de ‘abuelita’.


Amado Dios: ¡Cuánto agradecimiento tengo para darte! Me has dado lo más dulce y tierno de la vida: mis adorables Muñecos. Por ahora dos mi Señor, pero el otro pronto llegará. Ya lo quiero tener entre mis brazos; mecerlo bajo el aire fresco de un atardecer y juguetear igual que con mis otros dos tesoros. Mi Dios y Señor, ya que me has dado la dicha de tenerlos, te ruego que pintes con tu pincel en sus delicadas caras, la sonrisa tierna de sus años inocentes; te los entrego buen Dios para que los cuides y lleves de tu mano; por favor no los sueltes, son aún tan frágiles y vulnerables que no quisiera verlos llorar. ¡Son Tuyos Señor antes que míos! Guárdalos y arrúllalos en su sueño; y de día corre junto a ellos. Gracias, muchas gracias mi Señor.


Un abrazo y bendiciones.

martes, 16 de noviembre de 2021

No hay por qué entristecerse

No estén tristes, pues el gozo del Señor es nuestra fortaleza. 

Nehemías 8:10.


Lectura: Nehemías 8:1-10.  Versículo del día: Nehemías 8:10.


MEDITACIÓN DIARIA


El pueblo de Israel reunido, le pide al sacerdote Esdras que también era su maestro, que llevase el Libro de la ley para leerlo. El sacerdote Esdras leyó el libro, lo cual conmocionó a toda la asamblea. Seguro que fue un mover del Santo Espíritu. Todos tenían el mismo sentir: hambre por la Palabra de Dios. Fue tan emocionante este nuevo encuentro del pueblo de Israel, después de haber vuelto de su cautiverio que al oír las palabras de la ley la gente comenzó a llorar, por eso, el gobernador Nehemías, el sacerdote Esdras y los levitas que enseñaban les dijeron: “No lloren ni se pongan tristes, porque este día ha sido consagrado al Señor su Dios” (v. 9). Nehemías los despidió diciéndoles que fueran y festejaran, que comieran bien y compartieran la comida con quienes no tenían nada. Y les recalcó: “No estén tristes, pues el gozo del Señor es nuestra fortaleza”.

Ahora, es hermoso, cautivante y edificante ver a la Iglesia del Señor reunida para compartir no solo la Palabra de Dios, sino igualmente la Cena y la comunión entre los hermanos. Una relación que se da exclusivamente con base en el amor ofrecido por nuestro amado Señor Jesús, y que es el motor para guiarnos y llevarnos de la misma manera como su legado: dándolo todo por amor. Me gozo en el Señor porque a pesar de ser muy pequeña la Iglesia donde el Señor nos ha puesto, puedo constatar que se percibe el mismo ambiente de amor y solidaridad entre los asistentes. El amor rompe todo obstáculo y si llegamos caídos allí las palabras de aliento y de consolación nos levantan. ¡Gloria al Señor por mi Iglesia!


Señor Jesús: gracias porque no es por la cantidad sino por la calidad lo que nos ha movido a continuar en ese pedacito de espacio a donde nos reunimos por ahora cada domingo. Gracias porque tal vez otros días hemos estado un poco más cómodos, pero siempre teniendo presente que Eres nuestro Líder y ejemplo a seguir. Quizá en otro tiempo nos darás algo con características como las que soñaba tu siervo David para tu templo. Te daremos gracias por tu benevolencia, sin jamás olvidar que somos cada uno de nosotros los portadores de esa, la que llamamos Iglesia. Utilízanos como los templos del Espíritu Santo que es lo que esperas de tus hijos. Gracias, muchas gracias buen Señor. Gracias porque teniéndote a Ti, las tristezas se disipan. Gracias porque bien lo dijo Nehemías: no hay que estar tristes porque el gozo Tuyo es nuestra fortaleza. ¡Te amamos Señor!


Un abrazo y bendiciones.

lunes, 15 de noviembre de 2021

Gratitud a través de la alabanza continua a nuestro Dios

 ¡Ofrece a Dios tu gratitud, cumple tus promesas al Altísimo!”. Salmo 50:14. NVI.


Lectura: Salmo 50:1-15.  Versículo del día: Salmo 50:14.


MEDITACIÓN DIARIA

 

El Señor habla en este Salmo y bien les dice a los de su pueblo que Él es el Único Dios y que tanto los becerros como los machos cabríos, los animales del bosque y el ganado de los cerros le pertenecen, al igual que las aves del cielo y las bestias del campo. Aun dice el Señor que si tuviera hambre no lo diría porque el mundo y todo lo que contiene es de Él. No necesita ningún sacrificio de nuestra parte. Además, el Señor Jesús se ofreció en sacrificio así mismo, una sola vez y para siempre entregando su vida por los pecados de la humanidad (Hebreos 7:27). “Y, cuando estos han sido perdonados, ya no hace falta otro sacrificio por el pecado” (Hebreos 10:18).

Ante esto, entonces, ¿qué se le puede ofrecer al Señor? Lo que Dios demanda de nosotros es la verdadera gratitud. Sacrificios de alabanza, por una parte, y no dejar de cumplir lo prometido. ¡Cuánto tenemos que estarle agradecidos! Por su sacrificio en esa cruenta cruz somos salvos. ¡Gloria a Dios! El Señor Jesús murió por nuestros pecados y resucitó, para darnos vida eterna a su lado. “Por lo tanto, por medio de Jesús, ofrezcamos un sacrificio continuo de alabanza a Dios, mediante el cual proclamamos nuestra lealtad a su nombre” (Hebreos 13:15).


Amado Señor: no tenemos palabras para agradecerte tanto bien que nos has hecho. Tú siendo el Dueño de todo cuanto existe, nos miraste con amor y compasión para perdonar nuestras agresiones y darnos salvación. Bendito Señor y Dios: todo loor, honra y gloria te pertenecen. ¡Eres nuestro Rey, Señor y Salvador! ¡Te amamos!  


Un abrazo y bendiciones.

sábado, 13 de noviembre de 2021

¡El tiempo de la canción ha llegado!

 El amor no se deleita en la maldad, sino que se regocija con la verdad. Todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. 

1 Corintios 13:6-7 NVI.


Lectura: 1 Corintios 13:1-7.  Versículos del día: 1 Corintios 13:6-7.


MEDITACIÓN DIARIA


Esta es la mejor descripción del amor que haya podido encontrar y lógicamente está en la Palabra de Dios. Quise hacer mi devocional para hablar sobre el amor. Ayer 12 fue nuestro aniversario de bodas y hoy 13 el cumpleaños de mi hijito mayor Daniel Andrés. Por supuesto son dos diferentes clases de amor pero que en esencia son lo mismo.

Mi oración es porque el Señor me enseñe cada día a dar esa clase de amor, que es el mismo que Él nos ofreció. Es el amor que todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. Definitivamente es el amor cristiano que todos deberíamos practicar. No solamente con nuestro cónyuge o nuestros hijos. Ni siquiera es exclusivo para los que nos hacen bien, no; ahí entran todos, todos. El Señor jamás excluye a nadie y tampoco tenemos el derecho de hacerlo.

¿Qué más nos dice de esta clase de amor? “El amor es paciente, es bondadoso. El amor no es envidioso ni jactancioso ni orgulloso. No se comporta con rudeza, no es egoísta, no se enoja fácilmente, no guarda rencor” (vv. 4-5). ¿Será que nuestro amor sí es paciente y bondadoso? ¿No guarda rencor ni se enoja fácilmente? ¿No es orgulloso, ni envidioso? Reflexionemos y analicemos si estamos practicando este, el verdadero amor. Por mi parte, ese es el que deseo esparcir porque el tiempo de la canción ha llegado. El invierno se ha ido y han cesado ya las lluvias. Ya brotan flores en los campos (Cantares 2:11-12).


Amado Señor: gracias por enseñarnos el verdadero significado del amor. El que queremos tener para compartirlo también. Yo sé que no es fácil practicarlo, pero Tú que obras maravillas en nosotros puedes permitir que se asiente en nuestros corazones y por fe empezar a caminar Contigo. Eso deseamos bendito Señor. Gracias, gracias yo te doy por mi esposo y el amor que has puesto en él para orientarme y llevarme de su mano. Gracias, muchas gracias por la obra grandiosa que has hecho también en la vida de mi Danielito. Gracias por todo lo que nos enseñas a través de él. Eres Magnífico Señor y en mi corazón solo tengo palabras de agradecimiento hacia Ti. ¡El tiempo de la canción ha llegado!


Un abrazo y bendiciones.

viernes, 12 de noviembre de 2021

Teniéndote a Ti lo tenemos todo

 ¿Quién nos apartará del amor de Cristo? ¿La tribulación, o la angustia, la persecución, el hambre, la indigencia, el peligro, o la violencia? 

Romanos 8:35. NVI.


Lectura: Romanos 8:28-39.  Versículo del día: Romanos 8:35.


MEDITACIÓN DIARIA


No alcanzamos a dimensionar el amor de Dios y mucho menos cuando estamos en problemas. Yo creo que, por estar acostumbrados solamente a gozarnos con lo bueno, no valoramos también que con Dios las cosas cambian, porque como nos lo afirma Pablo: “Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman” (v. 28). ¿Si entendemos lo que Dios dispone? No; generalmente nunca lo entendemos, pero Dios que lo sabe todo, también sabe perfectamente por qué lo permitió así. No porque las cosas ocurran diferente a lo que deseamos e incluso oramos, es que Dios, no nos ama. Yo en ocasiones, he tenido que reconocer después, que Dios había actuado en mi favor, porque: ‘todas las cosas ayudan a bien’. El Señor quiere nuestro bienestar, así veamos multitud de obstáculos.

Sigamos viendo la lectura: “¿Qué diremos frente a esto? Si Dios está de nuestra parte, ¿quién puede estar en contra nuestra? El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no habrá de darnos generosamente, junto con él, todas las cosas?” (vv. 31-32). No dudemos del amor de Dios, porque nada ni nadie nos podrá separar de ese, su amor. Con Cristo somos más que vencedores. Sólo lo necesitamos a Él.


Amado Señor Jesús: gracias por ese amor inagotable que nos ofreces a diario pero que muchas veces lo pasamos inadvertido. Gracias porque tu Palabra dice que Contigo somos más que vencedores; ya te llevaste en la cruz del Calvario todas nuestras penas e incertidumbres. Ahora solo cuenta que nada absolutamente nada podrá separarnos del amor que Dios nos ha mostrado a través Tuyo. Gracias, muchas gracias bendito Señor. Teniéndote a Ti, lo tenemos todo.


Un abrazo y bendiciones.

jueves, 11 de noviembre de 2021

Tu propósito se cumplirá en cada uno de tus escogidos

Alabado sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en las regiones celestiales con toda bendición espiritual en Cristo. 

Efesios 1:3. NVI.


Lectura: Efesios 1:3-10.  Versículo del día: Efesios 1:3.


MEDITACIÓN DIARIA


Dios Padre nos ha bendecido con toda bendición espiritual en Cristo; miremos algunas de estas bendiciones: nos escogió en Cristo desde antes de la creación del mundo para que fuéramos apartados para Él y sin defecto alguno; nos predestinó para ser adoptados como hijos suyos por medio de Cristo; tenemos la redención mediante su sangre; el perdón de los pecados conforme a la riqueza de su gracia; nos dio a conocer el misterio de su voluntad de acuerdo al propósito establecido en cada uno de nosotros (vv. 4-9). No solamente nos lo dio a conocer, sino que nos afirma: “para llevarlo a cabo cuando se cumpliera el tiempo” (v.10).  

Tal vez, si todavía no entendemos el misterio de su voluntad para cumplir el propósito de Cristo en nosotros, pidámosle que nos lo dé a conocer. Su plan descrito desde el comienzo de los tiempos, seguro que se llevará a cabo, porque Dios terminará la buena obra empezada.


Amado Dios: Damos gracias a Ti Dios Padre y a nuestro Señor Jesucristo porque desde antes de crear el mundo ya nos tenía en tus planes. Es un misterio maravilloso que ni siquiera nuestra mente humana puede comprender. Nos sometemos por tu inmenso amor ofrecido, a tu perfecta voluntad en Cristo Jesús. Señor, dirige nuestros pasos y permite que tu plan se cumpla a cabalidad en cada uno de tus escogidos. ¡Te alabamos y te adoramos! ¡Te amamos buen Dios y Señor nuestro!


Un abrazo y bendiciones.


miércoles, 10 de noviembre de 2021

Tu bendita gracia me sostiene a pesar de no entender

No se engañen: de Dios nadie se burla. Cada uno cosecha lo que siembra. 

Gálatas 6:7. NVI.


Lectura: Gálatas 6:1-10.  Versículo del día: Gálatas 6:7.


MEDITACIÓN DIARIA


Yo diría que en términos usuales sí, se cosecha lo que se siembra. Sin embargo, he podido darme cuenta que no es regla general porque para mí, creo que sucede como con las promesas: tal vez, llegan a verlas los que vienen detrás, más no el que ha sembrado con amor. Y me baso en el caso de Job, aunque Job no murió sin contemplar su restauración total. Pero la Biblia dice que era un hombre justo a los ojos de Dios y fueron muchas las duras pruebas que enfrentó. Conozco casos donde no he entendido la voluntad de Dios y mucho menos su soberanía. Claro, esto me induce a buscar más al Señor y a indagar sobre el tema bajo los ojos espirituales con la ayuda del Espíritu Santo. Y digo esto bajo mi propio criterio y siendo honesta conmigo misma.

Hay otro punto importante más adelante: “No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos. Por lo tanto, siempre que tengamos la oportunidad, hagamos bien a todos, y en especial a los de la familia de la fe” (vv. 9-10). Es para mí, como una respuesta a lo expuesto anteriormente: sembremos, sembremos haciendo el bien siempre que lo podamos hacer, y al debido tiempo cosecharemos. No sabemos exactamente cuál será el debido tiempo, o cuál es el tiempo de Dios que es el que cuenta. Por eso es que considero que quizá la persona directa que ha sembrado no lo vea, pero sus padres o hijos podrán gozar esta bendición. De todas maneras, sigo afirmando lo que siempre escribo: ‘Dios no se queda con nada guardado’, así sea para verlo generaciones futuras.


Mi Señor amado: bien sabes que últimamente me he cuestionado varias cosas que aún martillan en mi cabeza y no logro darles la explicación correcta. Señor, no quiero pasar por encima de tu soberanía porque sé que tu voluntad, así no la entienda es buena, agradable y perfecta. Enséñame a mirar todo acontecimiento de mi vida con los ojos espirituales Tuyos. Dame sabiduría y discernimiento para entender lo que por ahora me cuesta y me retrae. Gracias porque sé que con dudas y todo, me sigues amando exactamente igual porque es tu bendita gracia la que me sostiene. ¡Te amo buen Señor y Dios mío!


Un abrazo y bendiciones.

martes, 9 de noviembre de 2021

Mientras no exista amor todo es una falsa piedad

¡Hemos ayunado delante de ti!—dicen ellos—. ¿Por qué no te impresionamos? Hemos sido muy severos con nosotros mismos, y ni siquiera te das cuenta. ¡Les diré por qué!—les contesto—.  Es porque ayunan para complacerse a sí mismos. Aun mientras ayunan, oprimen a sus trabajadores. 

Isaías 58:3. NTV.


Lectura: Isaías 58:1-14.  Versículo del día: Isaías 58:3.


MEDITACIÓN DIARIA


Esto es lo que el Señor les dice a los de su pueblo Israel en cuanto al ayuno. Y creo que ahora, a nosotros, su Iglesia le diría exactamente. ¿Cuántas veces se ayuna y se ora solamente por impresionar a los demás? Pero a Dios que lo ve todo y conoce los corazones no podemos engañar. ¿Sucede igual? ¡Claro! Sólo lo hacemos por complacernos; por demostrar una falsa piedad porque no hemos aprendido que para el Señor los sacrificios no valen. Importa, ante todo, el amor que ofrezcamos. Si tenemos amor no hay razón para maltratar al trabajador ni humillarlo. Quizá también consideramos, que tenemos todo el derecho de cuestionar al Señor con una serie de porqués, cuando el Señor es absolutamente Soberano y sus designios son irrefutables. Prosigue el Señor: “¿De qué les sirve ayunar, si siguen con sus peleas y riñas? Con esta clase de ayuno, nunca lograrán nada conmigo” (v. 4). No, no es esto lo que agrada al Señor.

Más bien, nos dice la lectura, que el ayuno que Él quiere es poner en libertad a los encarcelados injustamente; aliviar las cargas del trabajador; dejar en libertad a los oprimidos y soltar las cadenas que atan a la gente; compartir la comida, el refugio y el vestido con los que no tienen. Y si algo me impacta de esto, es entender que muchos están atados por las mismas imposiciones nuestras que no tienen razón de ser. Reflexionemos y pidámosle perdón al Señor por estas actitudes que para nada son de su agrado. Si no hay amor, todo se convierte en una falsa piedad.


Señor Jesús: a veces criticamos y sacamos el dedo acusador sin darnos cuenta que somos iguales o peores de quienes criticamos. Bendito Señor, perdona nuestra indolencia, nuestra falta de amor y nuestra falsa piedad. Enséñanos a verte a Ti en cualquier situación y no permitas que nos despotriquemos a hablar y señalar al que cae. Queremos ser íntegros en todas las áreas de nuestra vida y por encima de circunstancia alguna, demostrar el mismo amor y misericordia con la que a diario nos tratas a nosotros. Gracias, gracias Señor por demostrarnos que solamente valemos porque Tú nos levantaste. ¡Te amamos Dios y Señor nuestro!


Un abrazo y bendiciones.

lunes, 8 de noviembre de 2021

Somos mensajeros de vida no de muerte

Nadie puede negar que todos mueren, que sabios e insensatos perecen por igual, y que sus riquezas se quedan para otros. 

Salmo 49:10. NVI.


Lectura: Salmo 49:1-20.  Versículo del día: Salmo 49:10.


MEDITACIÓN DIARIA


La muerte física es una realidad, que indiscutiblemente a todos nos llega. El versículo del día nos dice que a tanto a sabios como a insensatos sucederá. La vida del hombre no es más que un suspiro; un soplo, una ilusión (Salmo 144:4). Muchas veces no la apreciamos porque la tenemos a nuestro lado en buenas condiciones. Pero con una simple caída y un dolor agudo sea en un dedo, todo el cuerpo se resiente y quizá empecemos a captar cuánto significa la vida humana para cada uno.  

Tal vez nos concientizamos sobre la muerte y la vida, cuando de un momento a otro se nos va un ser querido. Claro que pesa para tranquilidad, el hecho de saber que era una persona que había abrazado la fe cristiana; pero cuando no es así, nos queda el sinsabor del porqué no le compartimos, o el porqué, de no haberle insistido.  Así que es tiempo de proclamar la verdad del Evangelio del Señor Jesucristo. Él dijo ser el Principio y el Fin; el Alfa y la Omega; el Pan de vida; el Camino, la Verdad y la Vida; la Luz del mundo y la Puerta de las Ovejas. No dejemos de compartir esta Palabra para que así llegue la muerte física, la muerte espiritual no los toque. Convirtámonos en mensajeros de vida.


Señor Jesús: Tú no fuiste un charlatán ni mentiroso. Tú fuiste quien dijiste ser: el Hijo de Dios Altísimo que viniste al mundo a llevar sobre Ti, el peso de nuestras transgresiones. Permite buen Señor que este mensaje de salvación toque los corazones de cuantos lo lean y acepten que Eres el Salvador y Señor de la humanidad. Gracias te doy por cada una de las personas que sigue este devocional y por las que pones en el camino para llevarles un mensaje de fe y esperanza para sus vidas. Gracias, muchas gracias buen Señor por utilizarnos como mensajeros de paz y de tus buenas nuevas de salvación que traen vida y no muerte. ¡Te amamos Señor!


Un abrazo y bendiciones.

sábado, 6 de noviembre de 2021

Oración de alabanza al Señor nuestro Dios

 Tuyos, oh Señor, son la grandeza, el poder, la gloria, la victoria y la majestad. Todo lo que hay en los cielos y en la tierra es tuyo, oh Señor, y este es tu reino. Te adoramos como el que está por sobre todas las cosas.  

1 Crónicas 29:11. NTV.


Lectura: 1 Crónicas 29:10-20.  Versículo del día: 1 Crónicas 29:11.


MEDITACIÓN DIARIA


El Señor nuestro Dios es un Dios Soberano y sus designios son dados con un firme propósito. A veces no los entendemos porque ¿quién puede conocer la mente de Dios? Para nosotros es imposible. Sin embargo, hay muchas situaciones que aprendemos a ver con ojos espirituales y no con los físicos, y tal vez, en esos momentos logremos captar parte de su mensaje.

La lectura está basada en la oración de alabanza del rey David al Señor, cuando le iba a entregar el trono a Salomón y prosigue así: “La riqueza y el honor solo vienen de ti, porque tú gobiernas todo. El poder y la fuerza están en tus manos, y según tu criterio la gente llega a ser poderosa y recibe fuerzas. ¡Oh Dios nuestro, te damos gracias y alabamos tu glorioso nombre! ¿Pero quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que podamos darte algo a ti? ¡Todo lo que tenemos ha venido de ti, y te damos solo lo que tú primero nos diste! Estamos aquí solo por un momento, visitantes y extranjeros en la tierra, al igual que nuestros antepasados. Nuestros días sobre la tierra son como una sombra pasajera, pasan pronto sin dejar rastro” (vv. 12-15).


Gracias por tu Palabra Señor. Nos enseña cómo orarte y rendirte todo el honor y la gloria que mereces. Bien lo reconocía David tu siervo, porque todo, absolutamente todo viene de tu parte. No somos nada, si Tú no nos tocas y levantas. Y no es que nosotros te demos a Ti, es que primero Tú nos diste. Igual, no es que te hayamos buscado; fuiste Tú quien nos buscaste y nos cautivaste con lazos de amor eterno. Gracias, gracias por tanta bondad para los Tuyos. ¡Eres Admirable buen Dios y Señor Nuestro!


Un abrazo y bendiciones.

viernes, 5 de noviembre de 2021

Es ofreciéndolo con todo el amor

No niegues un favor a quien te lo pida si en tu mano está el otorgarlo. 

Proverbios 3:27. NVI.


Lectura: Proverbios 3:27-35. Versículo del día: Proverbios 3:27.


MEDITACIÓN DIARIA


No hay que negarse a hacer un favor. Hay que estar listos a tenderle la mano a quien lo necesite, si está a nuestro alcance ayudar. Estos detalles demuestran amor y eso fue lo que el Señor nos mandó a ofrecer. Así, que, si es un favor hay que hacerlo con todo el corazón. No porque me toca, porque me da pena, porque le debo uno. No, nada de esto es valedero. Si lo hacemos es porque en nosotros está el Señor y Él quiere que nos formemos de acuerdo a lo que nos dejó; de acuerdo a su carácter y Dios es amor. El amor es la virtud que debemos desarrollar por excelencia. Es la que nos motivará a perdonar, a restaurar, a colaborar y a entregarnos sin pedir nada a cambio. Si amamos al prójimo no tenemos por qué decir: ‘lo voy a pensar’, ‘quizá pueda’, ‘ven más tarde’ ‘de pronto sí’ (v. 28). No; si se va a hacer, se hace de una y sin evasivas. Tampoco mirar la posición de la persona. Dice el versículo ‘a quien te lo pida’. No es por conveniencia, ni por obligación; es dándolo con todo el corazón.


Señor Jesús: enséñanos a dar sin pedir nada a cambio. A dar como Tú lo hiciste. Bien lo dices en tu Palabra, que es mejor dar que recibir. Por otro lado, que nuestra mano izquierda no sepa lo que hace la derecha; que sea una actitud basada en el mismo amor que nos ofreciste y que ahora podamos retornarlo de igual modo a quien lo solicite. Gracias bendito Señor y Dios porque a través de estos actos, desarrollas tu carácter en cada uno de nosotros y eso es lo que anhelamos. ¡Te amamos Señor!


Un abrazo y bendiciones.

jueves, 4 de noviembre de 2021

Hay que declararlo para ser salvos

Esta es la palabra de fe que predicamos: que, si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo. 

Romanos 10:8-9. NVI.


Lectura: Romanos 10:1-13.  Versículo del día: Romanos 10:8-9.


MEDITACIÓN DIARIA


Dice la lectura que Cristo es el fin de la ley. Él ya cumplió el propósito por el cual se entregó la ley y, por lo tanto, todos los que creen en Él, son hechos justos a los ojos de Dios (v. 4). Si dices no conocer el mensaje, aquí te lo transmito: “En realidad, dice: El mensaje está muy al alcance de la mano, está en tus labios y en tu corazón. Y ese mensaje es el mismo mensaje que nosotros predicamos acerca de la fe” (v. 8 NTV). Si declaras abiertamente que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo. “Pues es por creer en tu corazón que eres hecho justo a los ojos de Dios y es por declarar abiertamente tu fe que eres salvo” (v.10). La Palabra de Dios es muy clara y aquí no hay vuelta de hoja, es tal cual como nos lo está diciendo. Hace poco escuché a una persona que dijo que todos íbamos para el cielo; no lo creo. Es creyendo en el corazón y expresándolo con la boca. No hay otra manera. El Evangelio de Juan también nos afirma que Jesús, era ya la luz del mundo y todo fue hecho por Él; vino al mundo, pero el mundo no lo reconoció. Los suyos no lo recibieron: “Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios” (Juan 1:12). Entonces, hay que recibir a Jesús en el corazón para ser salvos; para ir al cielo; para ser hijos de Dios.

Te invito a orarle; si nunca has declarado con tu boca lo que Él es y lo que vino a hacer por ti, te sugiero que lo hagas. Si te parece podemos orar así:


Señor Jesús: te necesito; sé que Eres el Hijo de Dios que viniste a este mundo a pagar por mis pecados. Hoy, confieso abiertamente que Eres el Señor y creo que Dios te levantó de entre los muertos. Toma mi vida; te abro la puerta y te recibo como mi Señor y Salvador personal. Haz de mí la persona que deseas que yo sea. Te doy gracias por perdonar mis pecados y darme una vida eterna a tu lado.


Un abrazo y bendiciones.