Voy a decirles a quién se parece todo el que viene a mí, y oye mis palabras y las pone en práctica: Se parece a un hombre que, al construir una casa, cavó bien hondo y puso el cimiento sobre la roca. De manera que cuando vino una inundación, el torrente azotó aquella casa, pero no pudo ni siquiera hacerla tambalear porque estaba bien construida.Lucas 6:47-48.
Lectura: Lucas
6:46-49. Versículos del día: Lucas
6:47-48.
MEDITACIÓN DIARIA
Así como hay que hacer
una buena mezcla de arena y cemento para lograr la consistencia necesaria al pegar
ladrillos y construir una casa, igualmente hay que levantar nuestra casa
espiritual para el Señor. Primero que todo hay que revisar que el terreno sea
firme para no equivocarnos al construirla;
no busquemos levantarla sobre la arena porque pronto se derrumbará. Luego hagamos una buena, muy buena mezcla de
oración y lectura de la Biblia. La oración
es el diálogo directo con el Señor, mientras la Biblia nos dice lo que Él
espera de nosotros, y las promesas guardadas para disfrutar la vida abundante
que nos ofreció.
Te pregunto: ¿Sobre qué
terreno estás edificado tu casa; sobre arena o sobre roca? La Palabra de Dios
es para ponerla en práctica y cimentarnos fuertemente en la fe. De esta manera
pueden llegar vientos, tempestades, borrascas e inundaciones y permanecerá
firme. Si ya estás construyendo tu casa, mi recomendación es que te cerciores de
que cada ladrillo puesto quede bien seguro, con suficiente mezcla para no tener
contratiempos y se derrumbe en el primer chubasco.
Amado Señor: Creo que
el edificar la casa sobre la roca es un continuo hacer. Enséñanos cada día a
poner en práctica lo que dices en tu Palabra para no equivocarnos y dejarnos arrasar.
Gracias buen Dios por estar siempre presente en esa construcción e ir
supervisando nuestro trabajo.
Un abrazo y
bendiciones.