Asustadas, se postraron sobre su rostro, pero ellos les dijeron: —¿Por qué buscan ustedes entre los muertos al que vive? No está aquí; ¡ha resucitado!Lucas 24:5.
Lectura: Lucas 24:1-12; Juan 16:17-24. Versículo del día: Lucas 24:5.
MEDITACIÓN DIARIA
Considero que para los cristianos no hay fiesta más grande
que la de la resurrección del Señor. Mi
tía Alejita, una monjita de la comunidad de “La Presentación”, llegó a la casa
materna un domingo de resurrección y su saludo fue: “!Felices Pascuas!”. Le pregunté el porqué de su gozo y su
respuesta fue, considero hoy, la más acertada que he escuchado: “hoy es la
fiesta más grande de la iglesia: ¡el Señor ha resucitado!”. Sí, con toda la razón; el apóstol Pablo lo
afirma: Si Cristo no ha resucitado vana
es nuestra fe (1 Corintios 15:14). Nuestra alegría es completa. “Ciertamente les aseguro que ustedes
llorarán de dolor, mientras que el mundo se alegrará. Se pondrán tristes, pero
su tristeza se convertirá en alegría”; “y nadie les va a quitar esa alegría”
(vv. 20 y 22b en la lectura de Lucas). La
resurrección del Señor Jesús es la que sostiene nuestra fe; la que nos recuerda
que también resucitaremos.
Hoy es día de gran regocijo: ¡La tumba de nuestro Líder está
vacía! Él venció. ¡Gloria a Dios por la resurrección de Jesús!
Amado Dios: Gracias porque así como levantaste a Jesús de los
muertos, también lo harás con nosotros.
Gracias porque es el misterio más grande de tu Iglesia; y sobretodo
gracias, porque somos partícipes de este gran acontecimiento y lo celebramos
con regocijo y paz en el corazón.
¡Felices pascuas de resurrección para todos!
Un abrazo y bendiciones.