La gente estaba sumamente asombrada, y decía: Todo lo hace bien. Hasta hace oír a los sordos y hablar a los mudos.Marcos 7:37.
Lectura: Marcos
7:31-37. Versículo del día: Marcos 7:37.
MEDITACIÓN DIARIA
Esto dijo la gente del
Señor Jesús cuando sanó a un sordomudo: “Todo lo hace bien”. El Señor Jesús lo
hacía todo bien y como hombre estaba obedeciendo la voluntad del Padre dejándonos
su ejemplo. Si bien es cierto que debemos esforzarnos por hacer las cosas bien,
nunca llegaremos a igualarlo porque podemos tener aptitudes para unas pero para
otras ninguna. Solamente Jesús ‘todo lo hace bien’. Él no se equivoca y todo lo
hace magníficamente. Muchas veces ni siquiera entendemos las maravillas que
realiza en nuestras vidas; nosotros mismos nos confundimos y no entendemos sus
caminos porque son tan excelentes que llegan a lo sobrenatural.
Fijémonos que ante el
asombro de aquellas personas que presenciaron al sordomudo escuchar y hablar,
Jesús les pidió que no se lo dijeran a nadie, pero ellos antes lo propagaron
más (v. 36). ¿Cuánto no ha hecho nuestro
buen Señor por nosotros? ¿Cuántas fichas no ha movido en nuestras vidas que nos
dejan asombrados? ¿Sí nos encargamos de difundir sus bondades maravillosas para
que otros también crean y le sigan?
Amado Señor Jesús: Todo
lo que has hecho en nuestras vidas es excelente; por eso te damos gracias
porque aun en ocasiones no lo hemos entendido, pero Tú si sabes para dónde has
querido movernos y permitir situaciones difíciles pero que llevan tu sello de
victoria. ¡Gracias, muchas gracias buen Jesús; todo lo tuyo es excelente!
Un abrazo y bendiciones.