Y cuando estén orando, si tienen algo contra alguien, perdónenlo, para que también su Padre que está en el cielo les perdone a ustedes sus pecados.Marcos 11:25.
Lectura: Marcos 11:12-25. Versículo del día: Marcos 11:25.
MEDITACIÓN DIARIA
El perdonar es una
decisión que influye también en la oración. Si queremos que Dios nos escuche
tenemos que hacer lo que nos corresponde y dentro de esa tarea está el
perdonar. ¿Cómo queremos que Dios nos perdone si nosotros no lo hacemos? En la
oración enseñada por el Señor se dice: “Perdónanos nuestras deudas, como
también nosotros hemos perdonado a nuestros deudores” (Mateo 6:12). Y después de la terminación nos aclara: “Porque
si perdonan a otros sus ofensas, también los perdonará a ustedes su Padre
celestial. Pero si no perdonan a otros sus ofensas, tampoco su Padre les
perdonará a ustedes las suyas” (Mateo 6:1415). No podemos pedir clemencia, si
no hemos sido clementes (Mateo 18:21-34).
El perdonar nos da
libertad; nos quita cargas; nos produce satisfacción y además de todo esto: nos
da acceso directo a nuestro Padre Celestial. Digo acceso directo porque nuestra
oración llega sin tropiezo alguno. Así que si queremos ver resultados, tomemos
la decisión de perdonar con corazón sincero, porque la oración sin perdón no
tiene contestación.
Amado
Señor: Gracias porque tu Palabra dice que si tenemos alguna discrepancia o
enojo contra cualquier persona, cuando estemos orando, recuérdanos a quién
hemos ofendido y danos la humildad y el coraje para pedir perdón y a la vez perdonar
como nos lo enseñaste.
Un abrazo y
bendiciones.
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