martes, 4 de marzo de 2014

Nuestra vida en el transcurso del día




La senda de los justos se asemeja a los primeros albores de la aurora: su esplendor va en aumento hasta que el día alcanza su plenitud. 
Proverbios 4:18.


Lectura: Proverbios 4:1-27.  Versículo del día: Proverbios 4:18.

MEDITACIÓN DIARIA

Gracias a Dios nosotros los cristianos hemos pasado de muerte a vida; de tinieblas a luz; de noche a día. Y ese día tiene que empezar desde nuestra misma entrega al Señor Jesús,  donde ya hemos sido justificados por su sangre: “será como la luz de la aurora en un amanecer sin nubes, que tras la lluvia resplandece para que brote la hierba en la tierra”. (2 Samuel 23:4). Va por etapas, en aumento. Dice el apóstol Pablo: “Así, todos nosotros, que con el rostro descubierto reflejamos como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados a su semejanza con más y más gloria por la acción del Señor, que es el Espíritu”. (2 Corintios 3:18).
Sin duda alguna, en esas etapas que van cruzando el día, tendremos tiempos borrascosos, tiempos desérticos. No importa que la lluvia nos atropelle; más bien permitiendo que todos estos tropiezos sean de gran provecho, porque nos van transformando hasta lograr el propósito de Dios en cada uno.  Sin temer el pasarlos porque: “Tu vida será más radiante que el sol de mediodía, y la oscuridad será como el amanecer”. (Job 11:17).
Debemos subir siempre por el sendero de la vida; permitir que el esplendor vaya de aumento en aumento y estar listos para  alcanzar el día perfecto. “De este modo, todos llegaremos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a una humanidad perfecta que se conforme a la plena estatura de Cristo” (Efesios  4:13). En ese día, la plenitud será total.

Amado Señor: Muchas gracias por permitir que crezcamos de tal modo que nuestro esplendor vaya en aumento a medida que pasa el día. Te pedimos que nos muevas a compartir ese hermoso amanecer a todos aquellos que todavía no conocen los primeros albores de la aurora y andan en tinieblas.

Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: