Jesús le respondió: Nadie que mire atrás después de poner la mano en el arado es apto para el reino de Dios.Lucas 9:62.
Lectura: Lucas
9:57-62. Versículo del día: Lucas 9:62.
MEDITACIÓN DIARIA
Al aceptar al Señor Jesús
en nuestras vidas, también aceptamos lo que dice su Palabra y las reglas que
nos da para vivirla de una manera excelente. Y si empezamos esta nueva vida, no
debemos retroceder porque en primer lugar sería como decirle al Señor que poco
nos importó su sacrificio y por otro, nos convertimos en irresponsables en la
orden de la Gran Comisión. Tenemos la responsabilidad de compartir su mensaje
de salvación y de ayudar a otros a levantarse en el Evangelio. No es fácil; el
mismo apóstol Pablo, confiesa que aún no lo ha logrado; pero hace algo muy
importante: se olvida de lo que queda atrás y se esfuerza por continuar sin desmayar, con la bendita
esperanza de que ganará el premio ofrecido por Dios (Filipenses 3:13-14).
El mirar atrás no nos
deja nada bueno; en Isaías también se nos dice: “Olviden las cosas de antaño; ya
no vivan en el pasado” (Isaías 48:18). Esto no está escrito porque sí; es
porque Dios sabe cómo es el corazón del hombre y qué fácil le queda dejarse
llevar por los recuerdos y sentimientos que en últimas vienen a hacerle más
daño que bien. Los tres casos narrados en la lectura, nos muestra que la vida
cristiana no es por sentimientos, sino por fe. Y como siempre lo recalco: Hay
que insistir, persistir y no desistir.
Amado Señor: Si Tú
mismo ya olvidaste nuestro pasado, no permitas que nosotros lo estemos
recordando y demos marcha hacia atrás. Queremos persistir contigo hasta el
final cogidos de tu mano bondadosa y fiel. Gracias porque nos enseñas a vivir
en el presente teniendo como meta la gloria futura. ¡Tú eres Grande Señor!
Un abrazo y
bendiciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario