jueves, 19 de marzo de 2015

La mejor inversión




Servir al pobre es hacerle un préstamo al Señor; Dios pagará esas buenas acciones. 
Proverbios 19:17.


Lectura: Proverbios 19:1-25.  Versículo del día: Proverbios 19:17.

MEDITACIÓN DIARIA

Creo que todos sabemos cuánto interés hay que pagar cuando nos toca valernos de un préstamo. Cuando volteamos los ojos hacia el menesteroso, se cambian los papeles y es el Señor quien viene a pagarnos los más altos intereses por la acción desarrollada. Siempre he dicho y lo sigo sosteniendo que el Señor no se queda con nada guardado sea bueno o malo. Y en este caso mucho más. “Recuerden esto: El que siembra escasamente, escasamente cosechará, y el que siembra en abundancia, en abundancia cosechará”; “Y Dios puede hacer que toda gracia abunde para ustedes, de manera que siempre, en toda circunstancia, tengan todo lo necesario, y toda buena obra abunde en ustedes” (2 Corintios 9:6 y 8).
También dice el Salmo: “Dichoso el que piensa en el débil; el Señor lo librará en el día de la desgracia” (Salmo 41:1); otras versiones dicen: el que piensa en el pobre” o “el que socorre al indefenso”. Todos van a lo mismo: al pobre, al menesteroso, al débil. Lo cierto es que el que pone sus ojos o siquiera piensa en el pobre, será grandemente bendecido. Eso lo dice la Palabra de Dios y su Palabra no miente. Entonces no dejemos pasar estas acciones de generosidad si ya entendemos lo que Dios hará por nosotros cuando estiramos las manos para ayudar al necesitado. Es la mejor inversión sin riesgo alguno de perder.

Amado Señor: Enséñanos a despojarnos de tanta ambición material y mirar con ojos compasivos a nuestro prójimo apurado y desprovisto de sus necesidades básicas. Pon en nosotros el amor caritativo y que en verdad sintamos como propias las aflicciones ajenas.

Un abrazo y bendiciones.
  

No hay comentarios: