jueves, 13 de noviembre de 2014

El tiempo de la canción ha llegado



¡Mira, el invierno se ha ido, y con él han cesado y se han ido las lluvias! Ya brotan flores en los campos; ¡el tiempo de la canción ha llegado! 
Cantares 2:11b-12.


Lectura: Cantares 2:10-13.  Versículo del día: Cantares 2:11b-12.

MEDITACIÓN DIARIA

No todo el tiempo estaremos en desiertos áridos ni tampoco bajo cielos nublados y lluvias torrenciales. ¡Qué buenas noticias nos da nuestro Amado Señor! Con su ternura habitual llega al corazón de aquel necesitado: del afligido por el dolor en una cama silenciosa; del turbado ante la escasez y la crisis financiera; del atribulado de espíritu, o herido y solitario por una muerte o un divorcio. No importa cuántas tempestades han caído o están cayendo en este momento.  Hay una voz que se pronuncia para dar aliento y calor; para dar una luz de esperanza a la vida afligida y para abrir sus brazos y sostener en el momento justo.
Es el mismo Señor quien ahora pronuncia tu nombre y dice que te levantes y vayas con Él (v. 10).  A su lado no hay nada que temer; por eso te asegura que el invierno se ha ido y las lluvias no te harán más daño. En tu vida ya empiezan a brotar hermosas flores y será armonizada por canciones que te alegrarán. “Convertiste mi lamento en danza; me quitaste la ropa de luto y me vestiste de fiesta, para que te cante y te glorifique,  y no me quede callado. ¡Señor mi Dios, siempre te daré gracias!” (Salmo 30:11-12).
Sin lugar a dudas; ahora levántate y adora al soberano Señor y Dios quien puede obrar más allá de lo esperado. Al gran consolador y sanador: nuestro Amado Señor Jesucristo.

¡A ti buen Jesús! Que conviertes en alegría la tristeza; que obras sobrenaturalmente en los que te buscan y aman, sea todo honor, gloria, alabanza y poder generación tras generación, por los siglos de los siglos. 

Un abrazo y bendiciones.

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