martes, 18 de junio de 2013

Hay que morir para vivir




He sido crucificado con Cristo, y ya no vivo yo sino que Cristo vive en mí. Lo que ahora vivo en el cuerpo, lo vivo por la fe en el Hijo de Dios, quien me amó y dio su vida por mí. 
Gálatas 2:20.


Lectura: Gálatas 2:11-21.  Versículo del día: Gálatas 2:20.

MEDITACIÓN DIARIA

Si recibimos al Señor Jesucristo en nuestra vida, entonces esta declaración de Pablo debe de ser una realidad en nosotros. “Sabemos que nuestra vieja naturaleza fue crucificada con él para que nuestro cuerpo pecaminoso perdiera su poder, de modo que ya no siguiéramos siendo esclavos del pecado” (Romanos 6:6).  Ya no podemos simpatizar con el pecado, ni darle cabida, porque Cristo nos vino a liberar de ese yugo y con Cristo somos libres. “Pero si Cristo está en ustedes, el cuerpo está muerto a causa del pecado, pero el Espíritu que está en ustedes es vida a causa de la justicia” (Romanos 8:10); también dice: “Los que son de Cristo Jesús han crucificado la naturaleza pecaminosa, con sus pasiones y deseos” (Gálatas 5:24).
¿Queremos vivir? Entonces tenemos que morir indiscutiblemente. Tenemos que crucificar el ego; desplazarlo, para darle paso al Señor y que sea Él quien se encargue de transformar en vida, aquello que estaba muerto. No podemos decir que estamos con Cristo y que el Señor vive en nosotros si dejamos por fuera aunque sea una sola de las áreas.  Hay que dejar morir lo que ya no sirve y  desecharlo, para que Cristo Jesús se gloríe en la nueva vida porque somos nuevas criaturas; al punto de entender que si vivimos, vivimos por Él y si morimos, pues mucho mejor: estaremos directamente en su presencia, lo cual se convierte en excelente ganancia (Filipenses 1.21). Entonces podremos decir también: “vivo por la fe en el Hijo de Dios, quien me amó y dio su vida por mí”.

Amado Señor: Enséñanos a morir con todo aquello que nos hace daño, para trasformar nuestros corazones  y gozar la verdadera vida que viniste a ofrecernos cuando moriste por nosotros en la cruz.

Un abrazo y bendiciones. 

No hay comentarios: