Que el Dios que infunde aliento y perseverancia les conceda vivir juntos en armonía, conforme al ejemplo de Cristo Jesús.Romanos 14:5.
Lectura: Romanos 14:1-16.
Versículo del día: Romanos 14:5.
MEDITACIÓN DIARIA
Es importante que los cristianos aprendamos a vivir en
armonía; de lo contrario poco testimonio damos y nos resistiremos a glorificar
a nuestro Dios y Padre.
Es común ver rencillas entre los hermanos de una
congregación, pero no debiera de ser así.
El versículo 7 nos dice: “Por
tanto, acéptense mutuamente”. ¡Cuánto
nos cuesta aceptar a las otras personas!
Siempre queremos que nuestros puntos de vista, se tengan en cuenta;
además, consideramos que no tenemos defectos y estamos mirando la paja ajena,
antes de mirar la nuestra. “¡Cuán bueno y
cuán agradable es que los hermanos convivan en armonía!” (Salmo 133:1). El
saber convivir en armonía nos trae bendición, nos dice más adelante el Salmo
133:3b. Decimos que queremos la paz,
pero la paz empieza por casa. Si como
cristianos nos cuesta vivir en armonía, ¿de qué paz podemos estar hablando?
A nosotros los gentiles nos corresponde alabar al Señor; la
raíz de Isaí que se levantó para gobernar a las naciones y para que en Él todos
los pueblos pongan su esperanza (v. 12).
De ahí, la importancia de vivir sin rencillas ni odios entre el pueblo
de Dios. Si somos uno solo en Cristo
Jesús, si lo confesamos de ese modo, entonces actuemos de manera que podamos
también unánimemente cantarle salmos: “Por
eso te alabaré entre las naciones; cantaré salmos a tu nombre” (v. 9). Ese es el sacrificio que el Señor espera de
nosotros: un sacrificio de alabanza; el fruto de los labios que confiesan su
nombre (Hebreos 13:15).
Amado Señor: Enséñanos a convivir en paz los unos con los
otros de manera que demos testimonio del amor tuyo y glorifiquemos tu
Nombre.
Un abrazo y bendiciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario