viernes, 8 de enero de 2010

La prudencia necesaria para construir

Por tanto, todo el que me oye estas palabras y las pone en práctica es como un hombre prudente que construyó su casa sobre la roca.

Mateo 7:24.

Lectura diaria: Mateo 7:1-29. Versículo del día: Mateo 7:24.

ENSEÑANZA

“El que me oye estas palabras y las pone en práctica”, fueron las palabras directas del Señor Jesús. El capítulo 7 de Mateo nos exhorta primero que todo a no juzgar. Generalmente, tendemos a ver los defectos en los demás, pero no advertimos los nuestros. De ahí la importancia del testimonio, no podemos pretender que los demás se conviertan y dejen el pecado si nosotros andamos haciendo lo mismo. Si la carga es muy difícil, debemos aprender a pedir, buscar y llamar para que el Padre celestial nos responda y seguro, Él nos dará la sabiduría necesaria para ser compasivos y misericordiosos con el prójimo. Debemos buscar siempre el camino estrecho porque por estrecho que sea, es éste el que nos conduce a la vida eterna. Otra enseñanza de este capítulo es estar alerta en medio de tanto predicador y pastor falso. Una señal pueden ser sus frutos; si estos son buenos, es doctrina sana, pero cuidémonos ya que en este tiempo llueven a granel los llamados “pastores de garaje” que no buscan las almas perdidas sino su propio bien. ¿Qué significa construir la casa sobre la roca? Simplemente, aceptar la guía del Espíritu Santo pidiéndole su dirección y sabiduría para ser prudentes y andar con sigilo. Conversando con Dios todos los días y alimentándonos de su Palabra para que no nos coja desapercibidos e ignorantes las enseñanzas falsas y nos den golpe tras golpe que en vez de levantarnos y encontrar paz, quedemos en circunstancias más lamentables. ¡Que vamos a encontrar en el camino, cristianos hipócritas o mejor “cristinos”, muy seguramente! ¡Que no vamos a encontrar la Iglesia perfecta, también! Por eso debemos estar preparados, para que nada ni nadie pueda hacer tambalear nuestra fe. Así lleguen ráfagas de viento, lluvia o fuego que nuestra convicción y ojos estén puestos únicamente en el autor y consumador de la fe: el Señor Jesucristo.

Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: