martes, 13 de marzo de 2012

Leyes de Dios sobre la justicia

No imites la maldad de las mayorías. No te dejes llevar por la mayoría en un proceso legal. No perviertas la justicia tomando partido con la mayoría.
Éxodo 23:2.



Lectura diaria: Éxodo 23:1-9. Versículo principal: Éxodo 23:2.


REFLEXIÓN


Dios, es un Dios justo y misericordioso. De igual manera desea que los hombres actúen y por eso dejó también leyes para que se tuvieran en cuenta y se llevaran a la práctica. Dentro de esas leyes está la de la justicia que de hecho va ligada a la misericordia.

En la corta lectura se hace un llamado a ser imparcial especialmente con el pobre (vv. 3 y 6); a mantenerse alejado de cuestiones fraudulentas (v. 7); a no aceptar soborno (v. 8) y a no oprimir al extranjero (v. 9).

A lo largo de la Biblia también se hace alusión a la justicia. De hecho una de las causas para que haya paz es que también se practique justicia. Es algo tan claro que nosotros los colombianos podemos dar fe de ello. Desafortunadamente en todos los entes prima el soborno, el fraude, la mentira, y lo peor de todo, la corrupción que va carcomiendo toda entidad social. El corazón del hombre está tan alejado de Dios y tan endurecido que poco o nada le importan estos preceptos. Cada día vemos que unos se venden para favorecer a otros y otros tantos, se corrompen por amor al dinero y al poder, sin tener en cuenta que como dice el refrán: “Arriba está, quien abajo mira”. Pero como no hay temor de Dios, esto no influye en sus vidas.

Nosotros los cristianos debemos marcar la diferencia y empezar a dar testimonio de ello y el Señor permita que lleguen a los estrados altos del gobierno, personas dignas de llevar su nombre, con carácter y decididas a cambiar el signo de la historia en Colombia. Claro está que es tan pesada la maquinaria de la corrupción que pasarán hechos como el sucedido con nuestra Fiscal General de la Nación: una mujer que daba honor a sus creencias éticas y morales, pero precisamente esa maquinaria montada no le permitió que siguiera destapando lo podrido y corrupto de los llamados “padres de la patria”. Le doy gracias a Dios por la vida de la doctora Viviane porque de todas maneras sentó un precedente y como mujer cristiana dejó bien en alto su dignidad y el nombre del Señor.

Sin embargo, no se necesita solamente estar en posiciones de alto nivel, desde el lugar donde nos encontremos podemos practicar la verdadera justicia e ir poniendo nuestro granito de arena para que las cosas cambien.


Señor: Gracias por todos los cristianos que tienen puestos de autoridad. Permite que todos ellos den verdadero testimonio como hijos tuyos. Te pedimos que los cubras con tu preciosa sangre y les des sabiduría para sacar avante la labor encomendada.


Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: