Ser prudentes en todo tiempo y lugar

Yo, la sabiduría, convivo con la prudencia y poseo conocimiento y discreción. 
Proverbios 8:12. NVI.

Lectura: Proverbios 8:1-21. Versículo del día: Proverbios 8.12.

MEDITACIÓN DIARIA

¡Oh Dios! Definitivamente, la persona sabia es la que entiende la prudencia. Por eso Salomón nos recalca aquí en este capítulo de Proverbios, la necesidad que tenemos de buscar la sabiduría porque para todo es necesaria (vv. 12-21). “La sabiduría del prudente es discernir sus caminos” (Proverbios 14:8). Entonces, yo entiendo que le debe bastar al prudente saber para dónde va, así esté en contradicción con los de su entorno. Más no por esto buscar su aceptación o herir con su posición al prójimo, porque entonces no se estaría practicando el verdadero amor enseñado por el Señor Jesús. Recordemos que el amor no se comporta con rudeza; todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta (1 Corintios 13:5 y 7).

Como conclusión, lo mejor es practicar este otro Proverbio: “Cuida tu lengua y mantén la boca cerrada, y no te meterás en problemas” (Proverbios 21:23 NTV). Así que por más que tú creas saber una cosa, lo mejor es no mostrar lo que sabes; esto, dice Dios también (Proverbios 12:23). Oremos para que el Señor nos de la sabiduría necesaria para ser prudentes y discretos en todo tiempo y lugar.

Amado Señor: gracias porque podemos recurrir a Ti para buscar y entender lo que deseas de nosotros. Te rogamos, nos enseñes a llenarnos de tu sabiduría para que a través de esta podamos comprender completamente lo que significa la prudencia. Perdona Señor, las veces que no hemos cuidado nuestra lengua y hemos herido a otros con nuestras palabras. Buen Jesús, queremos practicar ante todo el amor. Danos la capacidad de amar como Tú lo hiciste. Gracias, muchas gracias bendito Señor.

Un abrazo y bendiciones.