Tenemos al más grande y poderoso Dios

El Señor le respondió a Moisés: —¿Acaso el poder del Señor es limitado? ¡Pues ahora verás si te cumplo o no mi palabra! 

Números 11:23.

Lectura: Números 11:10-25.  Versículo del día: Números 11:23.

MEDITACIÓN DIARIA

El pueblo de Israel estaba cansado de comer el maná y le reclaman a Moisés, quien a su vez, apela al Señor. El Señor le promete que tendrán carne en abundancia pero ni siquiera Moisés quien era el líder le creía: "Moisés replicó: —Me encuentro en medio de un ejército de seiscientos mil hombres, ¿y tú hablas de darles carne todo un mes?  Aunque se les degollaran rebaños y manadas completas, ¿les alcanzaría? Y aunque se les pescaran todos los peces del mar, ¿eso les bastaría?” (vv. 21-22). Era imposible de creer, pero el Señor Soberano y Dueño de todo lo creado, desata un viento que lleva codornices del mar y las riega alrededor del campamento para que ellos tengan alimento en abundancia (vv. 31-32), la promesa se hizo realidad. El Señor siempre cumple su Palabra; ¿si Él lo dijo no lo hará?  “Dios no es un simple mortal para mentir y cambiar de parecer. ¿Acaso no cumple lo que promete ni lleva a cabo lo que dice?” (Números 23:19).

Has leído sus promesas y crees en ellas, pero las crisis no son nada fáciles de cargar; llega el momento del titubeo y tu fe se viene abajo porque minimizas su poder. Solo analiza y reflexiona que nuestro Señor es el Grande, el Poderoso Dios de los imposibles y deposita tu fe en Él. “En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo buscan” (Hebreos 11:6).  ¡Gloria a Dios por tener al más Grande y Poderoso en nuestras vidas! ¡Al que cumple lo que promete y es nuestro Amo, Señor y Rey!

Amado Señor: No hay razón alguna para sentir temor por las dificultades que atravesamos si sabemos que te tenemos a Ti que eres un Dios amoroso y fiel. Te rogamos que nos des nuevas fuerzas para levantarnos y continuar de tu mano sabiendo que Tú cumples lo que prometes. Perdona nuestra incredulidad y aumenta nuestra fe. Muchas gracias bendito Señor.

Un abrazo y bendiciones.