¡Que el Señor haga que la mujer que va a formar parte de tu hogar sea como Raquel y Lea, quienes juntas edificaron el pueblo de Israel!Rut 4:11b.
Lectura: Rut 4:1-12.
Versículo del día: Rut 4:11b.
MEDITACIÓN DIARIA
La historia de Rut, la
moabita, es espectacular. Creo que ni ella ni su suegra Nohemí, se imaginaron
hasta donde iba a llegar su bendición.
Es el ejemplo clave para entender que los caminos nuestros no son los de
Dios y que definitivamente: “Dios dispone todas las cosas para el bien de
quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito”
(Romanos 8:28). Es claro que Dios tenía un propósito definido con Rut: fue la
bisabuela del rey David y por consiguiente hace parte de la genealogía del
Señor Jesús.
Los buenos deseos de
los ancianos que presenciaron y fueron testigos de que Booz tomara a Rut como
esposa, se cumplieron totalmente: “¡Que seas un hombre ilustre en Efrata, y que
adquieras renombre en Belén! ¡Que por
medio de esta joven el Señor te conceda una descendencia tal que tu familia sea
como la de Fares, el hijo que Tamar le dio a Judá!” (vv. 11c-12).
Sin duda alguna Rut
superó a Raquel y a Lea. Booz doblemente bendecido al pertenecer no solo a la
simiente real de David sino también a la del Rey de reyes y quien con su
actuación amorosa y desinteresada, deja una lección inigualable para muchos
hombres que solo les interesa su machismo, sin ir más allá y ver lo que hay en
el fondo de una mujer ejemplar.
Que esta historia nos
sirva de lección para no dejarnos llevar por las circunstancias adversas y no
mirar el trasfondo de lo que puede hacer Dios.
Pase lo que pase, Él cumplirá su propósito en nosotros.
Amado Señor: No
solamente te pedimos que nos des un corazón humilde, generoso y apacible como
el de Rut; también te rogamos pongas la
fe suficiente para saber siempre, que nos llevas de tu mano por el mejor
camino.
Un abrazo y
bendiciones.
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