Los labios sinceros permanecen para siempre, pero la lengua mentirosa dura sólo un instante.Proverbios 12:19.
Lectura: Proverbios 12:1-28. Versículo del día: Proverbios 12:19.
MEDITACIÓN DIARIA
La mentira ofende a
Dios y por consiguiente es pecado.
Satanás es el padre de la mentira; le gusta engañar a la gente para
precisamente, alejarla de Dios. Recordemos que esta fue el arma que usó para
hacer pecar a Adán y Eva . Desde la misma institución de los ‘Diez Mandamientos’,
el Señor prohíbe la mentira (Éxodo 20:16);
sin embargo, pareciese que significa poco para la personas porque ya se
tiene entre lo común y cotidiano.
Nosotros los cristianos,
deberíamos dar ejemplo. Pablo nos amonesta a que no lo hagamos: “Dejen de
mentirse unos a otros, ahora que se han quitado el ropaje de la vieja naturaleza
con sus vicios, y se han puesto el de la nueva naturaleza, que se va renovando
en conocimiento a imagen de su Creador” (Colosenses 3:9-10).
La mentira está
catalogada como cualquier abominación hacia Dios. Miremos lo que la Biblia dice: “Pero los cobardes, los
incrédulos, los abominables, los asesinos, los que cometen inmoralidades
sexuales, los que practican artes mágicas, los idólatras y todos los
mentirosos recibirán como herencia el lago de fuego y azufre” (Apocalipsis
21:8, el subrayado es personal).
No permitamos que la
mentira nos invada y actuemos como los fariseos: aparentando que somos
creyentes, pero llenos de falsedad por dentro.
El mismo Señor amonesto a los judíos fuertemente al respecto: “Ustedes
son de su padre, el diablo, cuyos deseos quieren cumplir. Desde el principio
éste ha sido un asesino, y no se mantiene en la verdad, porque no hay verdad en
él. Cuando miente, expresa su propia naturaleza, porque es un mentiroso. ¡Es el
padre de la mentira!” (Juan 8:44).
El Señor Jesús nos dio
ejemplo de verdad. Meditemos de quién deseamos ser verdaderos hijos, ¿de
nuestro Padre celestial, o del padre de la mentira? “Cuando ustedes digan “sí”,
que sea realmente sí; y cuando digan “no”, que sea no. Cualquier cosa de más,
proviene del maligno” ( Jesús de Nazaret en Mateo 5:37).
Amado Señor: Tú eres la
Verdad por excelencia y nosotros decimos que te conocemos; por lo tanto te
rogamos que nos revistas con ropajes llenos de verdad y alejes por completo la
mentira de nuestros labios.
Un abrazo y
bendiciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario