sábado, 14 de septiembre de 2013

No es porque sí. Tiene su razón



Ustedes han dicho: ‘Servir a Dios no vale la pena. ¿Qué ganamos con cumplir sus mandatos y vestirnos de luto delante del Señor Todopoderoso si nos toca llamar dichosos a los soberbios, y los que hacen lo malo no sólo prosperan sino que incluso desafían a Dios y se salen con la suya?’. 
Malaquías 3:14-15.

Lectura: Malaquías 3:13-18.  Versículos del día: Malaquías 3:14-15.

MEDITACIÓN DIARIA

Sin decirnos mentiras, creo que muchos en algún momento dado de nuestra vida, nos hemos preguntado lo mismo.  A veces no entendemos, cómo les puede ir tan bien (aparentemente, puede ser), a los que no conocen a Dios ni cumplen sus mandatos.  Los vemos prosperar sin mayor preocupación ni altibajo posible, y de igual manera como dice el versículo “incluso desafían a Dios y se salen con la suya”.
En un revés, el Señor puede darnos mucho más de lo perdido.  Sin embargo, nos cuesta creerle o más bien, resignarnos a eso.  En la lectura, el Señor dice que estas son insolencias contra Él y lógico que no está nada de acuerdo con ellas (v. 13).  Pero si necesitamos algo que nos reconforte, también nos aclara lo siguiente: “Entonces se escribió en su presencia un libro de memorias de aquellos que temen al Señor y honran su nombre. «El día que yo actúe ellos serán mi propiedad exclusiva —dice el Señor Todopoderoso—. Tendré compasión de ellos, como se compadece un hombre del hijo que le sirve” (vv. 16b-17).  Los reveses que se nos presentan, no son porque sí; Dios también se gloriará y manifestará su poder a su debido tiempo.

Amado Dios: Te damos gracias por enseñarnos a entender tu Palabra y a aceptar los infortunios que nos suceden. Gracias Señor, porque si dices que todo nos ayuda a bien, es porque somos tu propiedad, y en tus designios sabes exactamente por donde llevarnos.

Un abrazo y bendiciones.  

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