lunes, 22 de abril de 2013

Conducir a otros hacia el verdadero Dios

Al pasar y fijarme en sus lugares sagrados, encontré incluso un altar con esta inscripción: A un dios desconocido. Pues bien, eso que ustedes adoran como algo desconocido es lo que yo les anuncio. 
Hechos 17: 23.

Lectura diaria: Hechos 17:16-34. Versículo diario: Hechos 17:23.

MEDITACIÓN DIARIA

Pablo, estando en Atenas, vio como los atenienses tenían multitud de dioses y con la sabiduría y elocuencia que Dios le había dado, empezó a predicarles al Dios que hizo el mundo, el cielo y la tierra (v. 24), hasta hacerlos reflexionar y sentir la necesidad de conocerle: “Esto lo hizo Dios para que todos lo busquen y, aunque sea a tientas, lo encuentren. En verdad, él no está lejos de ninguno de nosotros, puesto que en él vivimos, nos movemos y existimos” (vv. 27-28).  Les hace ver que es necesario el arrepentimiento y los deja inquietos sobre el tema (vv. 30-32).
A veces creemos que se nos cierran las puertas para hablar del Señor sin mirar más allá, y quizá perdemos buenas ocasiones a las que podemos darle otro rumbo y aprovechar las circunstancias o eventos para llegarle a la gente.  Cuántos dicen creer en “alguien”, aunque no sepan exactamente quien es ese “alguien”.  Otros tantos afirman frases como: “todos los caminos conducen a Roma”, dando a entender que vamos en la misma dirección.  Todos pueden conducir a Roma, pero existe uno más exacto que nos puede llevar a la Jerusalén celestial.  Aprendamos a buscar estrategias y habilidades que nos permitan guiar a otros a los píes de Cristo con diplomacia y sin herir susceptibilidades. 

Amado Señor: Nosotros entendemos que eres el Creador del cielo y de la tierra; que somos hechura tuya y nos has dado la oportunidad de conocerte como Señor y Salvador.  Hoy te pedimos que nos llenes de tu sabiduría y destreza para conducir a otros hacia tu redil. Toma la vida de aquellos que no sabían que eres el verdadero Dios que te manifestaste a la humanidad, y que estás más cerca que ningún otro, con el fin de darles salvación.

Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: