sábado, 10 de abril de 2021

Defenderlos ante los ataques del enemigo

Cuando los fundamentos son destruidos, ¿qué le queda al justo? 

Salmo 11:3. NVI.


Lectura: Salmo 11:1-7.  Versículo del día: Salmo 11:3.


MEDITACIÓN DIARIA


Bueno, personalmente creo que el fundamento del cristianismo está basado en la fe. “En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo buscan” (Hebreos 11:6). Entonces, al tener como base ese fundamento podemos entender también por fe, las verdades que encierran nuestro cristianismo: por fe creemos en la Trinidad; la Encarnación; el nacimiento de Cristo; su pasión, muerte y resurrección; la Ascensión de Él al cielo; su Segunda Venida y por ese mismo fundamento es que creemos en el nacimiento espiritual de cada persona, cuando le entrega su vida a Cristo, empezando por la propia.

Estos fundamentos los puede destruir la sociedad, el mundo, los falsos maestros, o quienquiera porque en estos tiempos son muchos los que desean destruirlos. Pero tú: “Compra la verdad, y no la vendas” (Proverbios 23:23 RVR 1960). Hay una verdad que está por encima de todas y es la que tienes que adquirir, antes que nada: “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”. Jesús, es el verdadero fundamento de nuestra fe cristiana. No lo sueltes ni lo negocies. Proverbios 3:3 nos dice que, lo ates alrededor de tu cuello y lo escribas en el libro de tu corazón. Así, que nos queda defender nuestros cimientos basados en la fe.


Amado Señor: Tú Eres el Hijo de Dios, muerto y resucitado. Eres el Único Camino y Verdad para llegar al Padre. No permitas que nuestra fe se derrumbe ni nos dejes negociarla con nadie ni por nada. Enséñanos a defenderla y a llevarla siempre atada alrededor del cuello y escrita en el libro de nuestro corazón, tal como lo enseña Tu Palabra. Gracias buen Señor.


Un abrazo y bendiciones.

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