¡Anda, perezoso, fíjate en la hormiga! ¡Fíjate en lo que hace, y adquiere sabiduría!
Proverbios 6:6. NVI.
Lectura: Proverbios
6:6-11. Versículo del día: Proverbios
6:6.
MEDITACIÓN DIARIA
Casi nunca se habla de la
pereza y la pereza es un pecado que conlleva a otros pecados. Por eso es
importante también hablar sobre el tema. Según Wikipedia la describe así: ‘pereza
es la negligencia, astenia, tedio o descuido en realizar actividades’. Bien recuerdo
desde niña, que en el catecismo enseñado figuraba como pecado capital y además
daba la solución: ‘contra pereza, diligencia’.
Considero que la pereza
puede generar desorden y Dios nos manda hacer todo de manera apropiada y con orden
(1 Corintios 14.40). La Biblia dice que al principio la tierra era un caos
porque estaba en desorden (Génesis 1:2), hasta que Dios puso su mano sobre ella.
Recuerdo a ver leído en alguna parte que el orden refleja a Dios, mientras el
desorden al diablo. Sí, estoy convencida que a Dios le gusta el orden; y qué
mejor que ver, por ejemplo, una casa ordenada.
Aparte del desorden la
pereza puede producir ira, soberbia u orgullo, en quien la padece. Por eso
tratemos siempre de proceder en toda actividad de forma apropiada y con orden.
La clave está en realizar todo como para el Señor y no para los hombres
(Colosenses 3:23). Vayamos en contra de la pereza, siendo diligentes.
Amado Dios:
gracias por tu Palabra porque a Ti no se te olvidó el más mínimo detalle de tu ‘Manual
de Instrucciones’, Gracias por el ejemplo que nos das a través de la hormiga, a
ser diligentes. Queremos hacer las cosas de la mejor manera como para Ti. Gracias
bendito Señor. ¡Te amamos!
Un abrazo y bendiciones.
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