jueves, 9 de junio de 2016

En tus manos están nuestros tiempos




Nunca preguntes por qué todo tiempo pasado fue mejor. No es de sabios hacer tales preguntas. 
Eclesiastés 7:10.


Lectura: Eclesiastés 7:10-22.  Versículo del día: Eclesiastés 7:10.

MEDITACIÓN DIARIA

A veces ocurre que nos remontamos al pasado y resultamos nostálgicos y tristes. Si el pasado fue agradable hay que recordarlo con alegría; y si fue triste, lo mejor creo yo, no es olvidarlo sino aceptarlo como tal. De todas maneras, unos y otros son obra de Dios (v. 14) y de ambos nos manda dar gracias. Sin embargo, si a Dios no le gusta que estemos recordando el pasado es porque Él sabe perfectamente que no nos deja nada bueno. “Olviden las cosas de antaño; ya no vivan en el pasado” (Isaías 43:18). Si nos obsesionamos con el pasado, no dejamos actuar al Señor y Él necesita renovarnos. Ahí también en Isaías nos dice lo siguiente: “¡Voy a hacer algo nuevo! Ya está sucediendo, ¿no se dan cuenta? Estoy abriendo un camino en el desierto, y ríos en lugares desolados” (Isaías 43:19). ¿Cuántas veces nosotros mismos nos encargamos de parar la bendición? El apóstol Pablo nos dejó esa enseñanza: “Más bien, una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y esforzándome por alcanzar lo que está delante” (Filipenses 3:13).
Tenemos un presente con el Señor Jesucristo y una bendita esperanza de un futuro a su lado. No nos detengamos a mirar atrás. Lo de este mundo es pasajero; la nueva vida de arriba es eterna.

Amado Señor: Gracias por saber que ante todo eres nuestro presente. Un día pusimos la mirada en Ti y decidimos seguirte; no permitas que nos devolvamos hacia atrás. Llévanos de tu mano para continuar contigo  hacia la meta que nos tienes preparada. Gracias porque eres el propósito real de nuestras vidas y contigo estamos seguros.  ¡En tus manos están nuestros tiempos!

Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: