Elías se presentó ante el pueblo y dijo: ¿Hasta cuándo van a seguir indecisos? Si el Dios verdadero es el Señor, deben seguirlo; pero si es Baal, síganlo a él.1 Reyes 18:21.
Lectura del día: 1 Reyes 18:1-46. Versículo del día: 1 Reyes 18:21.
MEDITACIÓN DIARIA
No está el profeta Elías acá,
pero sería muy importante preguntarnos sobre nuestra fe verdadera. ¿Hasta cuándo
seguimos indecisos? ¿Si creemos en el
Señor, como el Dios verdadero? Si así es, entonces sigámoslo como debe ser pero
no estemos de un lado para otro, o tomando la Palabra como agüero o
sutilmente. Hay muchos que se dicen cristianos pero se comportan muy
diferente. Otros son cristianos de solamente los Domingos y el resto de la
semana, hagámoslo fiesta porque es como si no contara; o más bien cuenta pero
no para agradar a Dios.
La Biblia nos habla sobre la tibieza: “Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi
boca” (Apocalipsis 3:16). ¿Todavía hay duda en el corazón que no nos permite
vislumbrar el verdadero camino a seguir? ¿Por qué dudamos? ¿Queremos que el
Señor se manifieste en nuestras vidas, dándonos plena certeza de que Él es, el
que era, el que es y el que ha de venir? Así, que si pretendes que puedes
compartir la gloria del Señor con otros ídolos o dioses estás pecando, porque
eso no es ser cristiano; estamos engañados por Satán quien nos hace creer que
bien podemos decir Señor para lo que nos conviene y bien dejarnos llevar por el
mundo cuando tambaleamos.
Hoy estamos aprendiendo que la
indecisión nos hace dudar. Que la indecisión nos vuelve tibios y estamos
corriendo un fuerte peligro porque dice el Señor que si esto ocurre, nos
vomitará. Hoy es el día de tu decisión: ¿Lo tomas o lo dejas?
Amado Señor: Gracias por tu
Palabra que es verdad. Verdad que cala hasta lo profundo y nos hace reflexionar.
Te pedimos bendito señor que nos enseñes a ser cada día más firmes en nuestra
convicción como cristianos. Señor Dios Todopoderoso, solamente Tú eres digno de
toda nuestra exaltación y adoración. Perdona nuestra tibieza y permite que sinceramente
te tengamos como el Dios verdadero que eres.
Un abrazo y bendiciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario