Porque el Señor tu Dios está en medio de ti como guerrero victorioso. Se deleitará en ti con gozo, te renovará con su amor, se alegrará por ti con cantos como en los días de fiesta.Sofonías 3:17.
Lectura diaria: Sofonías
3:14-20. Versículo principal: Sofonías
3:17.
REFLEXIÓN
Definitivamente es más fácil hacer
las cosas con amor que sin tener ese aliciente.
Por amor se renuncia a muchas cosas, incluso vemos como ya en las dinastías
donde impera la riqueza, la fama y el prestigio de una corona, cuando existe
amor de verdad nada de esto importa. El amor
verdadero hacia el Señor, nos hace ver sus mandatos como lo más natural y posibles
de cumplir. Estar cerca de nuestro amado
Señor es poder comprobar que fue su inmenso amor el que nos cautivó primero;
que día a día sus bondades se van renovando y que Él también se alegra y goza
cuando ve que sus hijos actúan como debe ser.
Dios nos ama y ese mismo amor nos
exhorta a retribuirle de la misma manera.
Si hemos caído, Él mismo se encarga de restituirnos y devolvernos la
sonrisa: “Yo te libraré de las tristezas que son para ti una carga deshonrosa”
(v. 18), y si hemos recibido atropellos e injurias: “En aquel tiempo yo mismo
me ocuparé de todos los que te oprimen” (v. 19a); es Él quien nos atrae
nuevamente sanando las heridas y levantándonos como desde un principio nos anunció;
estando siempre por cabeza y no por cola: “salvaré a la oveja que cojea y
juntaré a la descarriada. Les daré a
ustedes fama y renombre en los países donde fueron avergonzados” (v. 19b). Su restitución es total.
Si hemos olvidado ese primer
amor, volvamos a buscarlo para permitirle que sus brazos amorosos retornen a
infundirnos aliento, consuelo y consentimiento.
Amado Señor: ¡Cómo olvidar tu
gran amor! ¡Cómo olvidar que siempre has
estado a mi lado cuidándome y mimándome como a la niña de tus ojos! No Señor, no
puedo olvidar todo lo que has hecho por mí.
Sólo te pido, que no permitas jamás que los deleites y afanes de este mundo me separen de ti.
Un abrazo y bendiciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario