sábado, 5 de febrero de 2011

La fuente de mi inspiración

Porque en ti está la fuente de la vida, y en tu luz podemos ver la luz.
Salmo 36:9.


Lectura diaria: Salmo 36:1-12. Versículo para memorizar: Salmo 36:9.


ENSEÑANZA


Definitivamente si no fuera por el Señor, personalmente yo no lograría alcanzar muchos objetivos, en especial el compartir mis devocionales y llegar a otras personas que tienen hambre y sed de justicia. La luz resplandece en las tinieblas y esa luz es Jesús que brilla así sea en la más densa oscuridad.

Estoy feliz porque alguien a quien le compartí hace muchos años, y fue como la semillita que cayó en terreno árido, pero después de reencontrarnos, decidió buscar al Señor y esa semilla ahora se ha ido abonando en tierra fértil. Hoy es su bautismo en la iglesia y lógicamente mi deseo es estar acompañándola. Gracias a Dios por esta vida, que el Señor también regará para la obra y gloria de Él.

Cuando alguien me envía un mensaje de agradecimiento porque el devocional de ese día, llegó a su corazón y le tocó profundamente e incluso a personas que no conozco, es cuando entiendo que vale la pena continuarlos. Entonces, elevo mis ojos al Señor y le doy las gracias por permitirme ser un instrumento en sus manos; ¡Él es la fuente de mi inspiración! Toda la honra y gloria sea para Él, que vive por los siglos de los siglos.

La fuente de la vida es el Señor y es quien guía nuestros pasos en el diario vivir. Muchas veces damos mil vueltas sin encontrar la senda correcta, pero su luz nos va guiando hasta llevarnos por el camino que nos tiene preparado. De una cosa estoy segura: La Palabra de Dios nunca regresa vacía y eso me inspira.


Te invito para que te proveas de esa fuente inagotable y en su luz puedas reencontrarte contigo mismo, con los demás, y con los anhelos que tienes en tu corazón. Si es tu deseo podemos orar:


Amado Padre Celestial: Gracias por haber permitido que la luz de Jesús, llegue hasta mí. Señor Jesús, te entrego mi vida, perdona mis pecados y llévame por la senda señalada. Gracias Jesús por perdonarme y limpiarme; gracias por darme una nueva vida y por hacer de mi la persona que quieres que yo sea; gracias por llenarme de la fuente de tu Santo Espíritu y canalizar mis pasos. En el nombre de Jesús, amén.


Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: