lunes, 3 de mayo de 2010

La bendición sacerdotal

El Señor te bendiga y te guarde; el Señor te mire con agrado y te extienda su amor; el Señor te muestre su favor y te conceda la paz.

Números 6:24-26.

Lectura diaria: Números 6:22-27. Versículo del día: Números 6:24-26.

ENSEÑANZA

A todos ustedes que están leyendo este Devocional, les envío estas palabras de parte del Señor. En verdad es mi deseo que gocen de toda las bendiciones de Dios; que los guarde, lo mire con agrado y su amor los cubra por completo. Que cualquier petición puesta a sus pies se convierta en una realidad en sus vidas para que puedan gozar de paz y bienestar general. Hoy aprendí que no tenemos que esperar a un cumpleaños o una fiesta especial para enviar esta bendición a nuestros amigos y familiares; tampoco solamente pueden ser acreedores de ella, los que nos han hecho bien, debemos extenderla a amigos y enemigos “Pero yo les digo: Amen a sus enemigos y oren por ellos” porque esa es la voluntad de Dios (Mt. 5:44), y el nuevo mandamiento dejado por el Señor “Este mandamiento nuevo les doy: que se amen los unos a los otros. Así como yo los he amado, también ustedes deben amarse los unos a los otros” (Jn. 13:34). Tomemos la decisión de perdonar y amar por difícil que sea la situación y el agravio cometido; el Señor se encargará de quienes nos maltratan y persiguen. Por nuestra parte, hagamos lo que nos corresponde: bendigamos en todo tiempo y lugar a toda persona sin ninguna clase de distinción ni acepción.

Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: