¡Miren! Estoy creando cielos nuevos y una tierra nueva, y nadie volverá siquiera a pensar en los anteriores.
Isaías 65:17 NTV.
Lectura: Isaías
65:17-25. Versículo del día: Isaías
65:17.
MEDITACIÓN DIARIA
La lectura es muy similar
a Isaías 11. Personalmente, me atrevería a pensar que esta nueva tierra, será
la Jerusalén celestial que bajará del cielo. “Alégrense; regocíjense para
siempre en mi creación. ¡Y miren! Yo crearé una Jerusalén que será un lugar de
felicidad, y su pueblo será fuente de alegría. Me gozaré por Jerusalén y me
deleitaré en mi pueblo. Y el sonido de los llantos y los lamentos jamás se oirá
en ella” (vs. 18-19 en la lectura). Escatológicamente, no lo sé (la escatología
es la rama del cristianismo que estudia los acontecimientos finales). Otros
versados en el tema lo ven solamente por el lado espiritual que empezó para la
Iglesia de Cristo exactamente con su venida a la tierra hace dos mil años. Para
mí, puede ser la vida en el reino milenial de Cristo el Señor. Hay cosas
secretas que solo le pertenecen al Señor nuestro Dios (Deuteronomio 29:29). El
Señor Jesús les contestó a sus discípulos ante la pregunta de ellos si ya había
llegado el tiempo de restaurar el reino: “—Solo el Padre tiene la autoridad
para fijar esas fechas y tiempos, y a ustedes no les corresponde saberlo”
(Hechos 1:7 NTV).
Señor Jesús: tu
misma Palabra dice que hay cosas que aún no se le han revelado al ser humano y
esta puede ser una de ellas. Gracias porque Tú prometes que habrá un tiempo de
paz y bienestar. Un remanso donde la tranquilidad y la calma nos permiten disfrutar
gozosos de tu Presencia. Gracias porque sea ahora o después, estoy segura que
estaré en esta nueva Jerusalén. Gracias, gracias por tu Palabra que es verdad y
jamás falla. Gracias porque estaré Contigo por siempre y ya nada me podrá
separar de tu gran amor. ¡Te amo mi Señor!
Un abrazo y bendiciones.
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