martes, 6 de diciembre de 2016

Somos el mejor vaso moldeado por Él y para Él

Tú, oh Dios, nos has puesto a prueba; nos has purificado como a la plata. 
Salmo 66:10.

Lectura: Salmo 66:1-20.  Versículo del día: Salmo 66:10.

MEDITACIÓN DIARIA

Aparte de aprender y diría que aprender mucho ante las pruebas, las aflicciones nos sirven para que veamos el poder de Dios, lo glorifiquemos y exaltemos su Nombre. “¡Vengan y vean las proezas de Dios, sus obras portentosas en nuestro favor!” (v. 5). Han sido innumerables veces en las que he visto su mano bondadosa sobre mi vida no solo en el campo de sanidad  física sino también en el área espiritual y material.  El que haya estado dos veces al borde de la muerte es suficiente para que abra mi boca y lo dé a conocer como el Dios, que aun en estos tiempos también realiza milagros asombrosos. Las pruebas no son fáciles de llevar: de hecho nos enseñan, disciplinan y pulen; y esa pulida duele bastante. Pero lo hermoso de ellas es saber que Jesús quiere el mejor vaso para Él y somos ese vaso moldeado en sus manos.
Cualquier manifestación de Dios en nuestras vidas debe ser motivo de exaltación porque lo que nos ocurre en el andar diario, solamente son muestras de su infinito amor. Puedo decir igual que David: “Vengan ustedes, temerosos de Dios, escuchen, que voy a contarles todo lo que él ha hecho por mí. Clamé a él con mi boca; lo alabé con mi lengua” (vv. 16-17). Recientemente el Señor nos bendijo con el trabajo para mi esposo, que sabía,  tanto necesitábamos. ¡Gloria por siempre a Ti Señor! “¡Bendito sea Dios, que no rechazó mi plegaria ni me negó su amor!” (v. 20).

Si mi Dios y Señor: Gracias porque estás ahí presente en cada vicisitud para brindarnos tu consuelo, tu socorro y para mostrarnos tu grandeza. Gracias porque nos respondes y el tiempo tuyo es el exacto. ¡Te alabamos Señor y bendecimos tu Nombre! ¡La gloria es para Ti! Permite que todo lo que hagamos sea para honrarte; que seamos testimonio vivo demostrando al mundo que vives y reinas en nuestros corazones.

Un abrazo y bendiciones.

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