El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras jamás pasarán.Lucas 21:33.
Lectura: Lucas 21:5-38. Versículo del día: Lucas 21:33.
MEDITACIÓN DIARIA
El Señor les comenta a
sus discípulos sobre las señales del fin del mundo y les hace ver que los
hombres se desmayaran de terror por lo que va a suceder, porque los cuerpos
celestes serán sacudidos (vv. 25-26); pero aunque la tierra y los cielos queden
devastados, la Palabra quedará viva. “Les aseguro que mientras existan el cielo
y la tierra, ni una letra ni una tilde de la ley desaparecerán hasta que todo
se haya cumplido” (Mateo 5:18). El Señor les anuncia además que vendrán
persecuciones y la verdad, es que ya se están viendo alrededor del mundo sobre
el pueblo cristiano. Así que lo que tenemos para ofrecer es el Evangelio de las
Buenas Nuevas, por lo cual debemos empezar a instruirnos en la Palabra de Dios
con la disciplina de la memorización. Por eso dice Pedro: “pero la palabra del
Señor permanece para siempre. Y ésta es la palabra del evangelio que se les ha
anunciado a ustedes” (1 Pedro 1:25). Nuestra propia vida será en esos días, la
Biblia que daremos a conocer. Me explico: El testimonio de cada uno hablará por
sí mismo y lo que hayamos memorizado de La Palabra, será nuestra confirmación.
Personalmente considero
que el regreso del Señor está muy cerca y ya podemos divisar muchas señales
como las que nos habla este capítulo de Lucas. Entonces, propongámonos en este
nuevo año a memorizar versículos para estar preparados y que los
acontecimientos venideros, no nos tomen por sorpresa.
Amado Señor: Gracias
por tu Palabra que es verdad y nunca cambia. Gracias porque nos adviertes sobre
lo que vendrá, para que aprendamos a compartir a otros el mensaje de salvación con
la Palabra tuya que es viva y eficaz. ¡Te amamos Señor y esperamos tu pronto
regreso!
Un abrazo y
bendiciones.
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