Olviden las cosas de antaño; ya no vivan en el pasado. ¡Voy a hacer algo nuevo! Ya está sucediendo, ¿no se dan cuenta? Estoy abriendo un camino en el desierto, y ríos en lugares desoladosIsaías 43:18-19.
Lectura: Isaías 43:14-28.
Versículos del día: Isaías 43:18-19.
MEDITACIÓN DIARIA
¿Por qué no olvidar el pasado, máxime cuando ha sido
amargo? Si el Señor nos lo ordena, es
porque así es. Si recordamos y añoramos
el tiempo anterior, debe ser porque fue una época muy bonita y deseamos volver
a vivirla; o sea, nos estamos amargando por no estar en las mismas condiciones.
Si por el contrario, recordamos un tiempo de desolación y tristeza, tampoco nos
traerá paz ni esperanza. De todas maneras, sea por volver al tiempo bueno o
malo, el Señor nos dice que lo dejemos a un lado. Él está haciendo algo nuevo aunque no nos
demos cuenta de ello.
Considero que tanto en un caso como en el otro, lo que nos
queda es darle gracias a Dios por lo vivido y esperar que el nuevo día llegue.
Ni retroceder al pasado porque eso es: solamente un pasado; ni tampoco
adelantarnos al futuro, porque éste solo le pertenece al Señor. Por consiguiente nos toca aprender a vivir en
el presente: en el día a día, ya que cada nuevo amanecer trae su propio afán. El mejor momento de la vida es el que vivimos
plenamente; valorando lo que tenemos y sacando el mayor provecho a cada minuto
y segundo como si fuera el último de nuestra existencia. De ahí la importancia
de ofrecer lo mejor que tengamos, bien sea que se trate de compartir con
nuestros seres queridos, o de realizar el más excelente trabajo donde quiera
que lo desempeñemos.
Padre amado: Sabemos que estás haciendo un camino nuevo y que
tus planes son de bienestar y no de calamidad. Permite que te honremos asimilando
el presente, para disfrutar en plenitud
cada uno de los buenos días que nos tengas aquí en la tierra.
Un abrazo y bendiciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario