Y añadió: —¡Qué buena manera tienen ustedes de dejar a un lado los mandamientos de Dios para mantener sus propias tradiciones!Marcos 7:9.
Lectura: Marcos 7:1-23. Versículo del día: Marcos 7:9.
MEDITACIÓN DIARIA
No podemos dejarnos arrastrar por la tradición. La tradición se
vuelve rutina y por lo general lo rutinario nos aleja de la espontaneidad y de
la obediencia principalmente. Es bueno conservar las tradiciones familiares
(fiestas de navidad, cumpleaños, aniversarios etc.) y civiles (fiestas patrias,
folclóricas); pero con respecto a Dios antes que la tradición debe predominar
la obediencia.
El
Señor les llama la atención a los escribas y fariseos que por seguir con la
tradición, olvidaban lo más importante: el amar a Dios sobre todas las cosas y
cumplir sus mandatos: “Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón
está lejos de mí. En vano me adoran; sus
enseñanzas no son más que reglas humanas. Ustedes han
desechado los mandamientos divinos y se aferran a las tradiciones humanas” (vv.6-8).
Considero
que es bueno parar cuando percibimos que vamos encaminados hacia las
tradiciones y las rutinas, y comenzar de nuevo. Me explico: oramos siguiendo
una guía y esto lo volvemos repetitivo, como de costumbre; no le damos cabida
al corazón para que fluya abiertamente lo que tenemos adentro y por lo cual
pedimos. Lo digo, porque personalmente me ha sucedido y en verdad tengo que dar
un nuevo respiro a mis oraciones. Siempre lo he dicho: a quien primero habla el
Señor en los devocionales, es a mí.
Les
comparto la inquietud para que mediten sobre cómo se está dirigiendo su vida
espiritual; cómo van en su alimento diario y en sus oraciones, y vean si es el
momento de empezar de cero. Simplemente
sería como volvernos al primer amor con el Señor.
Amado
Señor: Ayúdanos a obrar con la mayor integridad en nuestra relación contigo. No
permitas que nos desviemos ni a derecha ni a izquierda, sino que siempre
andemos en dirección recta hacia ti sin olvidar que eres el Primero en nuestras
vidas y queremos hacer tu voluntad.
Un
abrazo y bendiciones.
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