Y ahora, que el Dios de paz —quien levantó de entre los muertos a nuestro Señor Jesús, el gran Pastor de las ovejas, y que ratificó un pacto eterno con su sangre— los capacite con todo lo que necesiten para hacer su voluntad..
Hebreos 13:20-21. NTV.
Lectura: Hebreos 13:18-21. Versículo del día: Hebreos 13:20-21a.
MEDITACIÓN DIARIA
Así es, nuestro Señor
Jesús es nuestro gran Pastor. Es el Pastor que nos cuida y vela día y noche.
Cuando nos desviamos y estamos caídos, golpeados y heridos, nos toma en sus
brazos, limpia las heridas y nos lleva nuevamente al redil. Este buen Jesús
está listo para capacitarnos en todo lo que necesitemos con el fin de hacer su
voluntad. Y dice la Palabra: “Que él produzca en ustedes, mediante el poder de
Jesucristo, todo lo bueno que a él le agrada. ¡A él sea toda la gloria por
siempre y para siempre! Amén” (v. 21b).
Amado Señor Jesús:
Soy consciente de cuántas veces me has tomado en tus brazos para darme tu calor
y abrigo; para hacerme sentir que no estaba sola; para decirme que me amas tal
como soy y no te soy indiferente. Gracias porque tu preciosa sangre me ha
limpiado, perdonado, sanado y liberado. ¡Te amo mi buen Pastor y Señor mío!
Quiero hacer tu voluntad y hacer lo bueno que te agrada. Gracias, muchas
gracias por tanto amor por mí. ¡Sí Señor, para Ti es toda la gloria por siempre
y para siempre!
Un abrazo y bendiciones.
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