El corazón del justo piensa bien antes de hablar; la boca de los perversos rebosa de palabras malvadas.
Proverbios 15:26. NTV.
Lectura: Proverbios
15:1-33. Versículo del día: Proverbios
15:26.
MEDITACIÓN DIARIA
Bien se puede
complementar con el versículo que dice así: “El que pierde los estribos con
facilidad provoca peleas; el que se mantiene sereno, las detiene” (v. 18). Si
leemos con atención este capítulo de Proverbios nos damos cuenta de cuántos
versículos nos hablan sobre la boca. Hay que tener mucha sabiduría para abrir
los labios, con ellos bendecimos, pero también maldecimos. Miremos algunos de
estos. Nos dice por ejemplo que el sabio sabe contestar apacible, así lo
maltraten y seguramente aplacará la ira del otro (v.1). Que las palabras dichas
con suavidad son un árbol de vida porque traen alivio y consuelo (v. 4). Que los
sabios dan buenos consejos; esparcen su conocimiento (v. 7). Aprendamos a
manejar nuestros labios. Es una manera fácil de vivir en armonía con el prójimo,
que nos produce alegría y que hermoseará nuestro rostro (v. 13).
Señor Jesús:
queremos ser sabios en nuestro hablar. Permite que nuestros labios se abran
solamente para alabar, bendecir, aconsejar, consolar y animar. Enséñanos, buen
Señor a frenar nuestra lengua; bien sabemos que no es fácil, pero con la ayuda
de tu Santo Espíritu podemos logarlo. Gracias, bendito Señor por tus
enseñanzas. Las acatamos y deseamos ponerlas en práctica. Recuérdanos siempre
que primero debemos pensar antes de hablar. Gracias, muchas gracias, buen
Jesús.
Un abrazo y bendiciones.
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