Pidamos por la paz de Jerusalén: Que vivan en paz los que te aman.
Salmo 122:6. NVI.
Lectura: Salmo 122:1-9. Versículo del día: Salmo 122:6.
MEDITACIÓN DIARIA
Personalmente siempre he amado a Israel.
Después de conocer al Señor Jesús y saber de su origen, con mayor razón. Por
otro lado, también he admirado esta nación, que para ser tan joven y pequeña es
una de las naciones que ha ofrecido al mundo más avances tecnológicos y científicos.
Miremos algunas particularidades de ellos: la población judía en todo el mundo
es de 14 millones, el 0.02 por ciento de la población mundial y han obtenido
170 premios Nobel. Israel tiene el hospital subterráneo más grande del mundo.
Una empresa israelí desarrolló un generador atmosférico de agua que forma agua
potable a través del aire. Por otro lado, la empresa israelí Given Imaging creó
la píldora cámara ingerible, la cual tiene luz, batería y permite grabar todo
el tracto digestivo, que admite detectar cualquier anomalía de una forma más
cómoda y menos invasiva. Esto para reemplazar la tan incómoda colonoscopía y
avanzar más contra el cáncer de colon. El primer sistema de mensajes usados en
internet fue el ICQ, creado por dos israelíes y lanzado a la red en 1996. Los
genios que inventaron el riego por goteo fue la familia israelí Blass; el riego
por goteo es un revolucionario sistema de regadío que permite darle a los
cultivos el nivel de humedad preciso, para que estos se desarrollen de forma
óptima. Las USB: estos pequeños objetos fueron creados en Israel y en su tiempo
fueron muy útiles. En Israel también inventaron el Waze y lo vendieron a Google
en el 2013. Israel no tiene la suficiente agua para suplir las necesidades de
uso doméstico, industrial y agrario, entonces logró convertir el agua de mar en
agua potable siendo un modelo a seguir en el mundo. Esto se llama
desalinización del agua. Podría seguir, porque la lista es larga. Israel con
sus 70 años continúa trabajando en pro del mundo. (Datos tomados por internet
de la Revista Israel 21 y de un video de Nadia Catann sobre grandes inventos de
Israel para el mundo).
Si amas a Israel oremos
por esta tierra y por la paz de Jerusalén:
Señor Jesús: ¡cómo
no amar esta tierra tuya! Si tus pies anduvieron por caminos empedrados y
polvorientos de esos tiempos. Si allí estuviste sanando enfermos, sacando
demonios, calmando vientos y tempestades, restaurando vidas y dando tanto de tu
amor. Sí mi Señor, ¡amo a Israel! ¡Amo a
la Jerusalén terrenal y espero con ansía la Jerusalén celestial! Gracias mi
Dios por esta tierra con grandes inventores. Oro para que la sigas cuidando y
velando por ella.
Un abrazo y bendiciones.
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