Confía en el Señor y haz el bien; establécete en la tierra y mantente fiel.
Salmo 37:3. NVI.
Lectura: Salmo
37:1-4. Versículo del día: Salmo 37:3.
MEDITACION DIARIA
Desde el Antiguo Testamento
el Señor siempre nos está diciendo que hagamos el bien. Hacer el bien en
cualquier área de la vida de otra persona trae su recompensa: “No nos cansemos
de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos por
vencidos” (Gálatas 6:9); ‘cosecharemos grandes bendiciones’, dice otra versión
y así es. Considero que la misma confianza en el Señor, nos lleva a ser dadivosos
y buenos. Es que el mismo amor ofrecido por el Señor nos cautiva de tal forma que
no queremos todo para nosotros; deseamos compartirlo con el necesitado tanto
espiritual, como física y emocionalmente.
¡Hay mucha hambre de Dios
en la tierra! El hombre (hablando en términos generales), se encuentra vacío y
no le halla sentido a la vida. Esto sucede porque está incompleto; su área
espiritual está nula, abolida. Urgentemente necesita encontrarse con Dios a
través de su Hijo Jesús, tal como lo dijo el filósofo matemático y apologista Plas
Pascal. Teniendo en cuenta lo anterior, empecemos por hacer el bien hablándole a
los inconversos de la persona de Jesús y cómo Él puede transformar sus
corazones y a la vez sus vidas, para que encuentren el verdadero camino y la
paz que sobrepasa todo entendimiento.
Amado Señor: no
solamente podemos hacer el bien con lo material. El hombre abatido, solo,
engañado y maltratado incluso, necesita urgentemente de Ti. Enséñanos a llevar
tu mensaje de las Buenas Noticias a todos ellos para que crean en Ti y empiecen
a gozar una vida diferente, donde tu bendita Gracia abunde y sea una fuente
inagotable de tu amor y misericordia. Gracias Señor por cada una de las
personas que está leyendo este devocional. Toca sus vidas y sé el sanador de su
cuerpo y salvador de su alma. En tu Precioso Nombre Jesús, amén y amén.
Un abrazo y bendiciones.
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