Un día el espíritu maligno les replicó: Conozco a Jesús, y sé quién es Pablo, pero ustedes ¿quiénes son?
Hechos 19:15. NVI.
Lectura: Hechos
19:1-22. Versículo del día: Hechos
19:15.
MEDITACIÓN DIARIA
Pablo en Éfeso estuvo
ministrando a algunos discípulos bautizándolos en el nombre del Señor Jesús; recibieron también el bautismo del Espíritu Santo y empezaron a hablar en lenguas y a profetizar (vv.
1-7). Dios hacía milagros extraordinarios por medio de Pablo, a tal grado que
la gente llevaba pañuelos y delantales que habían tocado el cuerpo de Pablo y
quedaban sanos de sus enfermedades y los espíritus malos salían de ellos.
Algunos judíos intentaron invocar sobre los endemoniados el Nombre del Señor Jesús,
quizá pensaron que esto era un juego, pero los demonios les salieron adelante, pues
no los conocían (vv. 11-16).
Bien nos podemos dar
cuenta que no todos tienen el don de expulsar demonios. Para mí personalmente
es una labor bien delicada y se necesita estar fuertemente cimentados en la fe del
Hijo de Dios, porque de lo contrario, vamos a recibir burlas y maltratos del
enemigo. No es creer por creer; también los demonios creen y tiemblan (Santiago
2:19).
Amado Señor Jesús:
nos presentamos delante de Ti para que nos llenes con tu Santo Espíritu y Él
nos dé la capacidad de arrojar demonios con poder, tal como lo hacía Pablo.
Gracias porque Tu Palabra es una sola y es verdadera. Creemos en toda la
Escritura y creemos en el poder glorioso del Hijo de Dios en nuestras vidas. ¡Te
amamos Señor!
Un abrazo y bendiciones.
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