sábado, 13 de junio de 2020

El Señor responderá más allá de lo imaginado


Clama a mí y te responderé, y te daré a conocer cosas grandes y ocultas que tú no sabes. 
Jeremías 33:3. NVI.

Lectura: Jeremías 33:1-11.  Versículo del día: Jeremías 33:3.

MEDITACIÓN DIARIA

El pueblo de Judá seguía pasando por difíciles pruebas; estaban heridos de muerte porque Dios había retirado sus ojos de ellos a causa de sus maldades. Sin embargo, Dios no se quedó ahí pasmado. Les envió promesas de restauración y por eso les dice: “Clama a mí y te responderé, y te daré a conocer cosas grandes y ocultas que tú no sabes”. Esa es su misericordia; su amor inmutable que desea hacernos el bien, a pesar de ser indiferentes. Él está dispuesto siempre: “Sin embargo, les daré salud y los curaré; los sanaré y haré que disfruten de abundante paz y seguridad. Cambiaré la suerte de Judá y de Israel, y los reconstruiré como al principio” (vv. 6-7). Cambia el Judá e Israel por el tuyo o el de tu país, porque estas promesas son para nosotros. “Se oirá de nuevo el grito de gozo y alegría, el canto del novio y de la novia, y la voz de los que traen a la casa del Señor ofrendas de acción de gracias y cantan: Den gracias al Señor Todopoderoso, porque el Señor es bueno, porque su amor es eterno. Yo cambiaré la suerte de este país —afirma el Señor— y volverá a ser como al principio” (vv. 10-11). Nuevamente vuelve a repetir que todo volverá a ser como al principio. ¡Gloria a Dios!
He tenido en mi corazón mucha carga por los Estados Unidos y la verdad es que me apropio de esta Palabra, porque el Señor volverá a levantar a esta nación y será grande nuevamente. Con acción de gracias volverá a cantar al Señor porque Él es bueno y su amor jamás se agota. Es el momento de unirnos y clamarle por nuestras naciones. El Señor responderá más allá de lo imaginado.

Señor Jesús: Tú bien sabes lo que está ocurriendo a nivel mundial y cómo nuestros países se han visto afectados en las diferentes áreas a causa de este virus y encierro obligatorio. Señor, te pedimos perdón por los pecados cometidos; porque nos hemos olvidado de Ti y hemos abandonado tus preceptos. Pero Tú nos dices que te clamemos y nos responderás. ¡Sana nuestra tierra bendito Dios! De una manera especial pongo ante tu Presencia a la nación de USA, a su presidente y mandatarios. Creo en tus promesas; declaro y proclamo que esta nación volverá a sus principios cristianos con los que fue levantada para la gloria y honra de tu Santo Nombre. ¡Te damos gracias y cantamos jubilosos por tu poder y gloria!

Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: