sábado, 6 de octubre de 2018

¡Creámosle a Dios! Es por nuestro bien


Hijo mío, si has salido fiador de tu vecino, si has hecho tratos para responder por otro, si te has comprometido verbalmente, enredándote con tus propias palabras, entonces has caído en manos de tu prójimo. 
Proverbios 6:1-3a.

Lectura: Proverbios 6:1-5.  Versículos del día: Proverbios 6:1-3a.

MEDITACIÓN DIARIA

A veces creemos que lo que nos dice la Palabra de Dios es por molestar nada más, pero no es así. Dios en su infinita sabiduría conoce muy bien el corazón humano. Es tan delicado el salir de fiador, que aquí en esta corta lectura se nos da una solución, pero para hacerla a la mayor brevedad: “Si quieres librarte, hijo mío, este es el camino: Ve corriendo y humíllate ante él; procura deshacer tu compromiso. No permitas que se duerman tus ojos; no dejes que tus párpados se cierren. Líbrate, como se libra del cazador la gacela, como se libra de la trampa el ave” (vv. 3b-5). Es que es tan delicada y comprometedora esta situación que se puede quedar en la calle literalmente por hacer ese favor. Hay que ser sabios en estas circunstancias. Me marcó mucho saber que una señora conocida le sirvió a su hermano de fiadora y por este hecho perdió no solo su casa sino a su esposo. Esto terminó con todo lo que era su hogar. Y eso teniendo en cuenta que no se trataba de un extraño sino su propio hermano.
Miremos otros versículos que nos hablan y previenen al respecto: “El fiador de un extraño saldrá perjudicado; negarse a dar fianza es vivir en paz” (Proverbios 11:15). “El que es imprudente se compromete por otros, y sale fiador de su prójimo” (Proverbios 17:18); en otras versiones dice: el torpe, el insensato, el falto de entendimiento, el poco inteligente. Definitivamente debemos poner atención a la Palabra de Dios porque esta no es más que el Manual que nos dejó para saber cómo comportarnos. ¡Creámosle a Dios! Es por nuestro bien.

Amado Señor: Gracias por tu Palabra que es verdad. Te pedimos nos des sabiduría y discernimiento para manejar esta clase de eventualidades. Igual también te pedimos entereza para saber decir ‘no’ cuando es necesario hacerlo. Gracias bendito Dios. ¡Te alabamos y te bendecimos!

Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: