Queridos hermanos, no crean a cualquiera que pretenda estar inspirado por el Espíritu, sino sométanlo a prueba para ver si es de Dios, porque han salido por el mundo muchos falsos profetas.
2 Juan 4:1.
Lectura: 2 Juan
4:1-6. Versículo del día: 2 Juan 4:1.
MEDITACIÓN DIARIA
Como cristianos ya
tenemos al Espíritu de Dios morando en nosotros; por consiguiente podemos
discernir cuando es o no es en verdad un ministro del Evangelio el que nos
habla. Además, que siempre debemos ir a la Biblia que es la Palabra de Dios y
examinarlo todo, como bien dice precisamente allí.
Como hijos de Dios
hemos vencido a esos falsos profetas porque es mayor quien está en nosotros que
el que está en el mundo. Todo el que conoce a Dios nos escucha, en cambio el
que no es de Dios, le aburre que hablemos sobre el Señor y no nos pondrá
atención (vv. 4-6).
En este tiempo vemos
que el mensaje de salvación se está difundiendo velozmente y que hay
mega-iglesias de las cuales no se sabe si importa la calidad o la cantidad. El
Señor mismo nos dejó la advertencia de cuidarnos de los falsos maestros y
profetas (Mateo 7:15), y Jeremías nos habla de los pastores que destruyen y
dispersan el rebaño del Señor (Jeremías 23:1-9). Así que hay que abrir bien los
ojos y pedirle al Espíritu Santo la guía para saber si una Congregación es de
sana doctrina o no.
Amado Padre: Queremos
ser parte de tu Iglesia prometida y te damos gracias por habernos mirado a los
ojos, sin temor alguno. Nos gozamos en ser tus hijos y por este mérito te
rogamos bendito Padre que nos ayudes a andar siempre en la verdad para que
estemos alertas y no vayamos a dejar que el Engañador nos llene la cabeza de
mentiras, haciéndonos desviar. Que aprendamos que Eres Tú nuestro Pastor y que
el Pastor que predica no es nuestro Señor. ¡Te alabamos Señor!
Un abrazo y
bendiciones.
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