Dios nos habla una y otra vez

Dios nos habla una y otra vez, aunque no lo percibamos.

Job 32:14.

Como dice más adelante en este mismo capítulo, Dios nos puede hablar en sueños, en visiones, cuando dormimos, y cuando estamos en silencio Dios habla muy quedo a nuestro oído. También Dios nos habla a través de las maravillosas obras de la naturaleza.

¡Dios nos habla una y otra vez! A través de su Palabra nos habla directamente. Tenemos es que aprender a escucharle. Tal vez, cuando oramos lo hacemos tan a la carrera que no nos damos el tiempo necesario para oír al Espíritu Santo, para que nos responda de acuerdo a lo leído o a las peticiones hechas. Aún así, Él sigue hablándonos.

Como padres reconocemos muy bien la voz de nuestros hijos, ¿cuánto más no conocerá el Padre Celestial la de los suyos? Dios, como pastor, está pendiente de su rebaño y quiere dirigirnos por sendas especiales pero nosotros somos desobedientes. Nos dice “no cojan por ahí” y nos desviamos haciendo caso omiso a la advertencia. Después simplemente, lo culpamos a Él y nos excusamos afirmando que nunca nos habló.

Con frecuencia no entendemos el lenguaje de Dios. Sin embargo, cuando nos disponemos a ser sensibles a su voz, podemos percibir el murmullo más suave y amoroso, a través de lo que menos imaginamos.

Tú puedes conocer a Dios a través de Jesucristo. Cuando tu relación con Él sea personal e íntima, lograrás escuchar la dulce voz de tu Padre Celestial, porque siempre estará a tu lado hablándote.

“Si escuchas hoy su voz, no endurezcas tu corazón”. ¡Dios no cesa de llamarte! Ábrele un espacio en tu vida a pesar de lo ocupado que puedas estar. Él desea que le escuches. Respóndele como Samuel: “¡Habla Señor, que tu siervo escucha!”.

Un abrazo y bendiciones.