Mis amados hermanos, quiero que entiendan lo siguiente: todos ustedes deben ser rápidos para escuchar, lentos para hablar y lentos para enojarse.
Santiago 1:19. NTV.
Lectura: Santiago 1:
19-26. Versículo del día: Santiago 1:19.
MEDITACIÓN DIARIA
Creo que este versículo
del día es ante todo para mí. Soy muy al revés: tarda para escuchar y rápida
para hablar. Muchas veces por querer hablar, no le pongo la suficiente atención
a lo que me están diciendo y esto sí que es un error craso.
Quizá a ti, te ocurra lo
mismo que a mí. Reflexionemos sobre el versículo y llevémoslo a la práctica
agregándole incluso el verbo enojar.
También es muy necesario ser lentos para esto. A veces ocurre que, por
hablar y hablar sin poner atención, resultamos enojados. Claro, enojados porque
no entendimos lo que nos dijeron, porque lo interpretamos mal o porque
simplemente no le pusimos atención; yo he tenido problemas por esta actitud.
Oremos al Señor para que nos enseñe a ser prudentes y sabios para hablar y
escuchar.
Señor Jesús:
personalmente vengo delante de Ti a pedirte perdón por las veces que me he
enojado, solamente porque no he entendido bien lo que se estaba hablando,
simplemente porque me cuesta poner atención. Buen Señor, te ruego que tu Santo
Espíritu, me revele la necesidad que tengo en esta área de mi vida y asuma con
carácter mi error. Necesito de Ti y me someto a tus reglas mi Dios. Hazme una
mujer sabia no solamente para tomar decisiones sino también para hablar menos y
escuchar más. ¡Gracias, muchas gracias, bendito Señor y Dios mío!
Un abrazo y bendiciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario