Por eso dice el Señor omnipotente: ¡Yo pongo en Sión una piedra probada!, piedra angular y preciosa para un cimiento firme; el que confíe no andará desorientado.
Isaías 28:16. NVI.
Lectura: Isaías 28:16-19. Versículo del día: Isaías 28:16
MEDITACIÓN DIARIA
Es la profecía sobre el Señor Jesús; Él es el cimiento
firme. El fundamento de la esperanza de redención esperada no solo para Israel
que no lo aceptó porque rechazaron esa piedra (Mateo 21:42); sino para toda la
humanidad. “Pero cada uno tenga cuidado de cómo construye, porque nadie puede
poner un fundamento diferente del que ya está puesto, que es Jesucristo” (1
Corintios 3:10b-11). Y Pablo también afirma: “como está escrito: Miren que
pongo en Sión una piedra de tropiezo y una roca que hace caer; pero el que
confíe en él no será defraudado” (Romanos 9:33). En otras versiones: “no será
avergonzado”. Así es; Dios no defraudará a quien confíe en Él.
Sobre ese fundamento es que tenemos que construir. No
hay otro y es el único cimiento firme. Cristo es la Piedra probada, angular,
preciosa, fundamental, bien colocada por Dios, como lo afirma la Biblia de las
Américas. Me gusta esta descripción tan enfática porque nos da más certeza para
confiar en quién hemos creído. Construir el edificio de nuestra propia vida
para que esta ayude a edificar igualmente a la Iglesia de Cristo. Nuestro bendito
Señor Jesús siempre está parado firmemente para sostenernos y no dejarnos tambalear.
Su Santo Espíritu nos llena de fortaleza y nos guía para seguir construyendo sobre
esa base irremovible. Vale la pena preguntarnos: ¿Cómo estamos construyendo?
Amado Señor Jesús: Gracias por ser Tú esa Piedra
preciosa, probada, fundamental y bien colocada para que podamos construir con
bases sólidas nuestra fe en Ti. Gracias porque jamás seremos avergonzados ni
defraudados. La esperanza de la gloria futura que viniste a levantar es la
razón nuestra para continuarla con la ayuda de tu Santo Espíritu. ¡Gracias
bendito Señor!
Un abrazo y bendiciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario