sábado, 26 de enero de 2019

Con corazón firme confiando en el Señor


(El justo) No temerá recibir malas noticias; su corazón estará firme, confiado en el Señor”. 
Salmo 112:7 NVI.

Lectura: Salmo 112:1-10.  Versículo del día: Salmo 112:7.

MEDITACIÓN DIARIA

El justo no temerá recibir malas noticias; pues confía en Dios de todo corazón. Es gratificante encontrar personas así. Yo tengo que confesar no serlo. Si sé una noticia mala, inmediatamente manifiesto mi preocupación o lloro. Tengo el ejemplo de mi consuegra que es todo lo contrario; de verdad es de admirar; en estos casos siempre tiene una palabra de aliento o positiva. Incluso cuando su esposo estuvo tan grave, ella confiaba plenamente en que el Señor lo sacaría adelante. Se encargó de darle ánimo a sus hijos, cuñados y demás familiares. Su corazón estaba seguro y al final vio derrotado al enemigo (v. 8), cuando Dios dijo sí a su vida a pesar de los pronósticos médicos. Fue un gran testimonio y por lo menos para mí, una gran lección. “Porque Dios, que ordenó que la luz resplandeciera en las tinieblas, hizo brillar su luz en nuestro corazón para que conociéramos la gloria de Dios que resplandece en el rostro de Cristo” (2 Corintios 4:6).
Sí mi consuegra lo tiene claro desde el comienzo, yo primero tengo que digerir lo sucedido y después lanzándome en los brazos de mi Señor empiezo a entender y vislumbrar el panorama. Como dice Pablo: somos vasijas de barro con tan preciado tesoro, para que entendamos que el poder viene de Dios. “Nos vemos atribulados en todo, pero no abatidos; perplejos, pero no desesperados; perseguidos, pero no abandonados; derribados, pero no destruidos. Dondequiera que vamos, siempre llevamos en nuestro cuerpo la muerte de Jesús, para que también su vida se manifieste en nuestro cuerpo” (2 Corintios 4:8-10). ¡Gloria a Dios por Jesús Nuestro Señor!

Señor Jesús: gracias porque teniéndote a Ti podemos pasar las dificultades que se presenten con la confianza, de que Tú vas delante con tu Santo Espíritu reconfortándonos y levantándonos para ver la gloria tuya en nuestras vidas. Gracias porque cada uno como barro que somos, necesitamos ser moldeados de manera diferente, pero siempre permitiendo que tu obra sea exaltada para contemplar Tu Poder y Majestad. ¡Bendito eres buen Señor! ¡Alabado sea tu Santo Nombre!

Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: