martes, 25 de septiembre de 2018

Tus caminos son los correctos


Santos, oh Dios, son tus caminos; ¿qué dios hay tan excelso como nuestro Dios? 
Salmo 77:13. NVI.

Lectura: Salmo 77:1-20.  Versículo del día: Salmo 77:13.

MEDITACIÓN DIARIA

El camino del Señor es perfecto. Él sabe exactamente por donde conducirnos, qué sendas abrirnos y cuáles cerrarnos. “Tú eres el Dios que realiza maravillas; el que despliega su poder entre los pueblos” (v. 14). Muchas veces creemos que Dios nos cambia los planes porque no nos da el gusto que queremos, pero no es así. En su infinito poder y sapiencia, el Señor sabe muy bien qué nos conviene y qué no. Cuando salimos del Llano en mi Colombia amada, yo lloraba, peleaba con Dios, lo cuestionaba y no entendía esa intención. Más tarde me di cuenta que ese era el momento exacto para emigrar hacia la capital del país porque de lo contrario alguno de la familia hubiera resultado muerto o secuestrado. Con razón dice Pablo: “Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito” (Romanos 8:28).
“Prefiero recordar las hazañas del Señor, traer a la memoria sus milagros de antaño. Meditaré en todas tus proezas; evocaré tus obras poderosas” (vv. 11-12). Sí; eso es lo que debemos hacer en esas circunstancias: tener el convencimiento de que, si el Señor actuó con poder en aflicciones anteriores, sabe por qué nos traslada a otra parte dejando a un lado nuestra zona de confort. No nos desanimemos. Busquemos la gracia a través del problema que estamos viviendo. Dios nos ama tanto que jamás sus planes son de calamidad. Además, sus caminos no son los nuestros y son correctos.

Gracias bendito Señor por indicarnos el camino y cambiar nuestros planes para colocar los tuyos. Enséñanos a acatar tu voluntad y a no dejarnos llevar por falsas opiniones ni temor alguno. Gracias por estar tan pendiente de nosotros cuando ni siquiera somos dignos de bien alguno. ¡Te alabamos y glorificamos por siempre! ¡Aleluya!

Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: