miércoles, 26 de septiembre de 2018

Tú lo decides Señor


Un hombre que tenía lepra se le acercó, y de rodillas le suplicó: —Si quieres, puedes limpiarme. 
Marcos 1:40. NVI.

Lectura: Marcos 1:40-45.  Versículo del día: Marcos 1:40.

MEDITACIÓN DIARIA

Yo no digo que el Señor tiene la obligación de sanarnos, pero sí estoy segura de que Jesús vino a darnos salud y medicina. También tengo la certeza de que creo en un Dios fiel y misericordioso y que me puedo acercar con toda confianza para decirle: ‘si quieres puedes sanarme’. Creo también que el Señor es soberano y que yo solamente soy barro en sus manos. En mi caso, el Señor lo ha hecho en dos ocasiones frente a mi salud. Hoy solo puedo decir que solamente por su infinita misericordia, me ha sacado del borde de la muerte y me ha dado vida nuevamente. Sin embargo, cuando Él decida llevarme estaré lista para partir hacia mi nueva morada. No puedo creer que voy a pasar por encima de mi Señor, como exigiéndole: ‘me tienes que sanar’.
Humildemente debemos acercarnos a Jesús como aquel hombre leproso; reconocer su autoridad y poder, y reconocer igualmente que no somos nada. Solo tenemos nuestra propia vida para entregársela y someternos a su voluntad que es buena, agradable y perfecta. Oro para que el Señor te responda: “—Sí, quiero. ¡Queda limpio!” (v. 41b). La decisión está en sus manos.

Amado Señor: Te doy gracias por tu inmensa bondad y amor derramado. Quiero decirte con todo mi corazón que mires la aflicción de mis amigos y hermanos y si deseas sanarlos, te lo agradezco inmensamente. Mi Señor, si decides lo contrario, solo te ruego que permitas que ellos te hayan conocido y partan gozosos hacia la patria celestial Contigo. ¡Te amamos Señor!

Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: