Al reflexionar sobre la muerte de su padre, los hermanos de José concluyeron: -Tal vez José nos guarde rencor, y ahora quiera vengarse de todo el mal que le hicimos.
Génesis 50:15.
Lectura: Génesis 50:15-21. Versículo del día: Génesis 50:15.
MEDITACIÓN DIARIA
Murió Jacob y los hermanos de José temieron que él
ahora se vengara de ellos por todo el mal que le causaron, pero no sucedió así.
Pensaron que no los perdonaría; sin embargo, la actitud de José fue de completa
nobleza, perdón y consolación. Cuando ellos se declararon sus esclavos él les
respondió: “No tengan miedo —les contestó José—. ¿Puedo acaso tomar el lugar de
Dios? Es verdad que ustedes pensaron
hacerme mal, pero Dios transformó ese mal en bien para lograr lo que hoy
estamos viendo: salvar la vida de mucha gente. Así que, ¡no tengan miedo! Yo
cuidaré de ustedes y de sus hijos. Y así, con el corazón en la mano, José los
reconfortó” (vv. 19-21).
La vida de José es un ejemplo claro de lo que hablaba
ayer sobre la armonía en la familia. Jacob sufrió en carne propia la envidia de
sus hijos hacia José. En parte, Jacob tuvo mucho que ver puesto que José sí era
el consentido de su padre. Los padres tenemos que ser imparciales con todos los
hijos precisamente para evitar estas situaciones. Y como en la historia de
José, lo mejor que se puede hacer es perdonar. Por el perdón de José, su
familia y descendencia pudo vivir en Egipto y salvar la vida de mucha gente
(vv. 20-21). Hay que perdonar para no dejar caer la armonía del hogar.
Amado Señor: gracias por tu Palabra y por enseñarnos a
perdonar incondicionalmente a nuestros hermanos y familiares. Tus designios son
tan perfectos que aún de lo malo sabes sacar bien para nosotros. Gracias,
muchas gracias buen Señor. ¡Te alabamos y te bendecimos!
Un abrazo y bendiciones.
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