jueves, 11 de febrero de 2021

Mirando sus atributos para saber que es Único Dios

 El Señor es lento para la ira, imponente en su fuerza. El Señor no deja a nadie sin castigo. Camina en el huracán y en la tormenta; las nubes son el polvo de sus pies.

 Nahum 1:3. NVI.


Lectura: Nahum 1:1-6.  Versículo del día: Nahum 1:3.


MEDITACIÓN DIARIA


El profeta Nahum tuvo una visión sobre Nínive y empieza contándonos cómo se manifiesta el Señor. Y esto creo que nos interesa a todos; no solo era para los de Nínive.

Nuestro Dios exige que le seamos fieles porque es un Dios celoso; cuando se enoja toma venganza (v. 2). ¿Por qué es un Dios celoso? Porque no desea que le antepongamos otros dioses. Él espera fidelidad total, completa y firme. Esto es lo que implica ‘amar a Dios sobre todas las cosas’. Por otro lado, es un Dios Poderoso; nadie puede negar el poder de Dios. Tan solo mirar su creación ya nos da una clara idea de su majestoso poder. Por eso mismo, camina en el huracán y en la tormenta: las montañas tiemblan ante Él y los cerros se derriten ante su Presencia.  La lectura nos dice también que siempre castiga a quien se lo merece; pero a la vez es un Dios paciente, lento para la ira. Nuestro Dios es un gran Papá: se enoja ante tanta maldad y crueldad, pero está atento a levantarnos cuando nos arrepentimos y volvemos los ojos hacia Él. Pienso yo, que aguanta y aguante hasta que le damos la espalda al pecado y cuando ya abusamos de su inmenso amor, nos hace entender que es un Dios de autoridad. Si no queremos entender, las consecuencias llegarán.

Analicemos sus atributos como Dios que Es y busquémosle de corazón ahora que todavía hay tiempo para el arrepentimiento. “Como se acaba de decir: Si ustedes oyen hoy su voz, no endurezcan el corazón” (Hebreos 3:15). Los israelitas no quisieron obedecerle y se rebelaron; pero nos corresponde no ser tercos como ellos y voltear los ojos hacia el Dios Todopoderoso, misericordioso y perdonador. Los tiempos son difíciles.


Amado Señor: gracias porque un día pudimos conocerte y saber que Eres nuestro Padre Celestial. Aprendimos que nos amas tanto, hasta el punto de dar a tu Hijo en propiciación por nuestros pecados y aceptamos esa ofrenda de amor para tener derecho a la patria celestial. Gracias porque al aceptar a Jesús en nuestras vidas nos hacemos partícipes de ser tus hijos. Reconocemos tu poder y sabemos que no hay otro Dios igual. Tú Eres el Único Dios Santo y Poderoso. ¡Te amamos Dios y Señor nuestro!


Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: