Les hablo así, hermanos, porque ustedes han sido llamados a ser libres; pero no se valgan de esa libertad para dar rienda suelta a sus pasiones. Más bien sírvanse unos a otros con amor. Gálatas 5:13.
Lectura: Gálatas 5:1-15. Versículo del día: Gálatas 5: 13.
MEDITACIÓN DIARIA
La verdadera libertad está en
Cristo Jesús. Ahora el hombre del mundo considera que hacer lo que quiere es
tener libertad y así no es. Porque ¿cuántas veces no se pasa por encima de los
demás, solo por conseguir lo que se cree es ‘mi libertad’? Lo triste de todo es
que se le está llamando a lo malo, bueno y a lo bueno, malo. Bajo estos
parámetros le es permitido hacer y deshacer sin el menor costo posible de sus
acciones.
El apóstol Pablo nos enfatiza
en que una cosa es gozar de la libertad y otra “gozar” del libertinaje. La
verdadera libertad nos da paz, sosiego, tranquilidad. Bien dice la Escritura: “Así
que si el Hijo los libera, serán ustedes verdaderamente libres” (Juan 8:36). El
Señor Jesús nos viene a liberar de la carga del pecado, de la fatiga, del
desánimo, de la frustración y del desconsuelo. En Cristo podemos descansar
plácidamente porque con Él, si encontramos perdón, bondad, mansedumbre y por
encima de todo amor.
Libre no es quien está por fuera
de una cárcel; es quien está libre de toda culpa y eso solamente lo podemos
encontrar a través de Jesucristo.
Amado Señor Jesús: Gracias
porque solamente conociendo tu Palabra podemos entender cuál fue el precio que
pagaste para darnos completa libertad. Gracias porque contigo somos libres, y a
eso nos has llamado. Permite Señor que por amor a Ti, caminemos derecho y sin
dejarnos tentar del maligno para darle rienda suelta a la naturaleza pecaminosa.
¡Te alabamos por tanta bondad hacia nosotros ofrecida!
Un abrazo y bendiciones.
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