miércoles, 20 de julio de 2016

Enséñanos a amarte como nos amas Tú

Y pido que, arraigados y cimentados en amor, puedan comprender, junto con todos los santos, cuán ancho y largo, alto y profundo es el amor de Cristo. Efesios 3:17b-18.

Lectura: Efesios 3:1-21. Versículos del día: Efesios 3:17b-18.

MEDITACIÓN DIARIA

Solamente cuando entendemos cuál fue la clase de amor que el Señor nos regaló, podemos verdaderamente dar el testimonio de lo que somos como creyentes. A veces pensamos que Dios nos ama porque lo conocimos y amamos primero, pero no es así. Su amor fluye en nosotros como consecuencia del ofrecido de antemano por Él.
Siendo Jesucristo la máxima expresión del amor, se me ocurre asimilarlo a lo que es una novia con su enamorado. Bueno, por lo menos en tiempos de antaño, la mujer era seducida por el hombre y éste la cortejaba hasta lograr su cometido. Sus detalles, su cariño, su respeto y su constancia obraban en ella y le era fácil aceptar esa relación. Creo que Dios hace lo mismo con nosotros: a lo largo de nuestra vida, de una u otra manera nos está mostrando su amor, hasta que llega el momento propicio y caemos rendidos a sus pies. “En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y envió a su Hijo para que fuera ofrecido como sacrificio por el perdón de nuestros pecados” (1 Juan 4:10). Y el amor de Dios por ese misterio que no podemos entender, se transforma en el amor que Cristo Jesús viene a ofrecernos, para que todo aquel que en Él crea, no se pierda sino que tenga vida eterna (Juan 3:16). Entonces, es ahí donde hacemos gala de novia conquistada y enamorada como lo somos, cuando entramos a formar parte de su Iglesia.  
Ahora, mientras regresa nuestro Amado para desposarnos y estar por siempre a su lado, demostremos su amor por donde quiera que vayamos, compartiendo su mensaje de amor y perdón a la humanidad caída.

Amado Señor: Muchas gracias por el amor que nos ofreciste sin merecerlo. Gracias porque solo por ese amor inigualable esperamos que vengas y nos lleves a tu recinto para hacernos tu esposa y gozar de tu presencia por la eternidad ¡Enséñanos a amarte como nos amas Tú!

Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: